Actualizado 27/01/2011 18:56

Casi el 90% de los niños afectados por las inundaciones en Pakistán tienen traumas psicológicos

Inundaciones en Pakistán
AKHTAR SOOMRO / REUTERS


MADRID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

Casi el 90 por ciento de los niños y niñas afectados por las inundaciones que se produjeron el verano pasado en Pakistán, uno de los peores desastres naturales de este siglo, tienen traumas psicológicos, según un estudio publicado por Save the Children este jueves, un día antes de que se cumplan seis meses desde que comenzaron las inundaciones.

Estos niños sufren traumas psicológicos, ansiedad, depresión y fobias a causa del desastre, que dejó más de 21 millones de damnificados. "El 87 por ciento de los niños está estresado o muestra agresividad, el 75 por ciento no es capaz de expresarse bien y el 70 por ciento se siente inseguro, tiene miedo a la gente, al agua, a los espacios abiertos y a la oscuridad", precisa el informe.

Lucía Losoviz, responsable de Programas Internacionales de Save the Children, ha explicado que "los niños y niñas aún están desolados y aterrados por lo que ha ocurrido". "No tienen ropa adecuada, han perdido sus juguetes y sus escuelas aún están cerradas. Si no reciben la ayuda necesaria para afrontar los problemas emocionales podrían tener baja autoestima e inseguridad más adelante", ha advertido.

Las familias afectadas en las provincias de Sindh, Punjab y Jyber Pajtunjwa tuvieron que dejar sus casas, destruidas por el agua, que arrasó pueblos y ciudades enteras, y los menores se llevaron la peor parte, según Save The Children, que para elaborar el estudio ha entrevistado a menores de entre cinco y quince años.

Naila, de diez años de edad, recuerda que después de las inundaciones se fue con su familia a un campamento de desplazados. "Aquellos fueron los peores días que he pasado en mi vida", y cuando "volvimos a casa unos meses después, todo estaba destrozado", relata.

"Ahora por lo menos puedo ir a la escuela y al espacio seguro donde juego y me siento feliz. Casi se me han olvidado los malos recuerdos que solía tener siempre en la mente", añade.

NIÑOS QUE TRABAJAN

Las inundaciones destruyeron más de 2,2 millones de hectáreas de tierras de cultivo, provocando una escasez de arroz, azúcar, vegetales y fruta. Además, mucha gente se quedó sin trabajo y ahora no tiene nada que llevar a casa, indica la organización, que ha constatado cómo ahora los niños y niñas se han visto forzados a trabajar y las niñas a casarse para ayudar a los padres a mantener sus negocios.

"Hay más de 6.000 niños y niñas en Punjab, Jyber PaJtunjwa y Sindh que trabajan para ayudar a sus familias y se han identificado más de 300 casos de matrimonios con niñas en las zonas afectadas por las inundaciones", precisa.

Dado que "las necesidades de los niños y las niñas se ven amenazadas cuando sus padres están sufriendo altos niveles de estrés", Save the Children intenta ayudarles ofreciendo apoyo emocional a los menores a través de "espacios amigables y servicios psicológicos", ha detallado Losoviz.

Seis meses después de las inundaciones, todavía hay casi siete millones de personas desplazadas. Losoviz ha insistido en "la urgente necesidad de proporcionar un hogar a las familias y una escuela para los niños y niñas para que así puedan recuperar cuanto antes la normalidad"

"Sin embargo, la reubicación es una tarea muy dura. En algunos lugares, el agua todavía no ha desaparecido. El proceso de recuperación será mucho más largo de lo que se pensó al principio y para atender todas las necesidades debemos continuar con nuestro apoyo", ha agregado.

Save the Children ha proporcionado ayuda de emergencia a más de 2,6 millones de afectados a través de cuidado sanitario, distribución de tiendas, utensilios de cocina, sacos de potabilización de agua, comida, apoyo emocional y educación.