C.Marfil.- La situación en Costa de Marfil mejora pero Naciones Unidas aún "tiene trabajo" que hacer en el país

NUEVA YORK, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

El subsecretario general de Naciones Unidas, Hédi Annabi, aseguró ayer haber percibido una muy "tangible" y "perceptible" relajación de la situación en Costa de Marfil, aunque reconoció que tras la firma del acuerdo de paz, la misión de paz de la ONU en el país africano aún tiene mucho trabajo por delante.

Annabi realizó estas declaraciones en una entrevista en la emisora del organismo internacional después de su visita de doce días a Costa de Marfil para evaluar 'in situ' la situación y preparar las recomendaciones que presentará ante el secretario general, Ban Ki Moon.

Tras reunirse con los líderes marfileños --incluidos el presidente Laurent Gbagbo y el primer ministro Guillaume Soro--, para conocer cuál es el papel que esperan que desarrolle Naciones Unidas en el proceso, Annabi constató una "voluntad muy clara de poner en marcha el Acuerdo de Uganda y de intentar cumplir el plazo fijado para este acuerdo".

El acuerdo de Uganda, firmado entre Gbagbo y Soro en el mes de marzo --con la mediación del presidente de la Comunidad Económica de los Estados Africanos del Oeste y presidente de Burkina Faso, Blaise Compaoré--, debe permitir resolver "los problemas clave que habían impedido los progresos sobre la identificación de la población, el desarme, la reforma y reestructuración de las fuerzas armadas, la restauración de la autoridad del Estado sobre el conjunto del territorio, la reunificación del país y la elaboración de listas electorales", con el objetivo de asegurar unos comicios "creíbles, libres y justos".

Respecto al papel que deberá jugar Naciones Unidas, el subsecretario general aseguró que todos los interlocutores habían confirmado "su deseo" de que la misión de la ONU "continúe su trabajo de apoyo para la puesta en práctica del acuerdo".

Sin embargo, advirtió de que serán necesarios ciertos ajustes de la acción de la ONUCI, principalmente sobre aquella deriva de la suspensión de la 'zona de confianza', que hasta ahora era controlada por las fuerzas de Naciones Unidas y francesas conocidas como 'Fuerzas imparciales', y que "deberá ser reemplazada por una línea verde en la que Naciones Unidas tendrá que instalar puntos de observación".

Así, aunque la responsabilidad del mantenimiento de la ley y del orden en la 'zona de confianza' sea "transferida a las Brigadas Mixtas marfileñas", las fuerzas de la ONUCI y las Fuerzas Imparciales, aún retirándose de dicha zona, conservarán "una presencia significativa".