BARCELONA, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Administración ha concedido la residencia familiar comunitaria a la mexicana Marcia-Gabriela Gasca, que la perdió por un error administrativo en el nombre de su marido --al confundir una 'f' por una 'j'--, según informó hoy el Col.lectiu Ronda en un comunicado.
Los abogados achacan esta decisión a la presión mediática y se congratulan por la rectificación que "demuestra la falta de seguridad jurídica" que ha sufrido la afectada y el "desamparo" al que se ha tenido que enfrentar la familia durante un año y medio.
Todo el proceso comenzó en enero de 2008, cuando Marcia solicitó la tarjeta de residencia comunitaria permanente tras llevar cinco años en España y estar casada con un español y se la denegaron porque cuando inscribieron su matrimonio en el Registro Civil de Vilassar de Dalt (Barcelona) cometieron un error tipográfico.
El matrimonio interpuso numerosos recursos, solicitó distintos permisos de residencia y acudió a varios tribunales sin resultado alguno. Hace un mes interpusieron una queja al Síndic de Greuges, al cónsul y a la embajada de su país para intentar resolver su situación, ya que denunciaron que se estaban vulnerando los derechos humanos y fundamentales del matrimonio impidiéndoles tener una vida en familia normal.
La joven llegó a España hace ocho años y en noviembre de 2002 contrajo matrimonio. Se matriculó en la universidad, empezó a trabajar, solicitó una hipoteca para su casa y obtuvo la tarjeta de residencia comunitaria el 15 de enero de 2003 con validez por cinco años.
Según Sergi Santacana, abogado del Col·lectiu Ronda, la resolución que denegaba la residencia a la joven iba en contra de los propios actos de la administración, ya que denegó una autorización que antes, con la misma documentación, había concedido. "Esto causa una terrible inseguridad jurídica", sostuvo.
