Actualizado 05/06/2007 14:14

Día Medio Ambiente.- El arzobispo de Valencia visita el parque natural de las Hoces del Cabriel

VALENCIA, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

El arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García-Gasco, visitará hoy, martes, el paraje de las Hoces del Cabriel, junto a los sacerdotes del arciprestazgo, y la parroquia de la localidad valenciana de Venta del Moro, que es la más próxima al Parque Natural.

El recorrido por las Hoces, que efectuará la comitiva en vehículos 'todoterreno', será guiado por el director del Parque Natural, Francisco Monterde, según José Antonio Teixeira, párroco de la localidad valenciana de Venta del Moro, que acoge más de 50 kilómetros del río Cabriel que atraviesa el entorno.

Entre las paradas de la visita, que coincide con la celebración hoy del Día Mundial del Medio Ambiente, figurarán el 'Mirador de la Fontseca', el 'Puente de Vadocañas', las hoces de 'Vicente' y del 'Purgatorio', entre otros meandros del río Cabriel, así como el denominado 'Rabo de la Sartén'.

El paraje, que fue declarado Parque Natural por el gobierno valenciano en junio de 2005 cuenta con un total de 31.446 hectáreas y está localizado en la comarca de la Plana de Utiel-Requena en el límite con la provincia de Cuenca . Por su superficie, constituye el mayor paraje protegido de la Comunidad Valenciana, ha añadido.

Tras el recorrido por las Hoces del Cabriel, el arzobispo de Valencia compartirá una comida de hermandad con los sacerdotes en la casa abadía de la parroquia Nuestra Señora de Loreto de Venta del Moro, que se encuentra en la actualidad en la última fase de obras de restauración. Asimismo el director del Parque Natural entregará a monseñor García-Gasco un libro con información e ilustraciones de las Hoces, dijo.

Los trabajos de restauración de la iglesia de Venta del Moro, iniciados hace ahora diez años, consisten en la restauración y pintura de la sacristía y del interior del templo, del siglo XVIII y estilo barroco, "que presentaba humedades", según Teixeira. Igualmente, en este tiempo ha quedado rehabilitada ya la fachada, las cubiertas, la casa abadía y la torre de la iglesia, "que amenazaba con peligro de desprendimientos". La última fase de obras, que comenzó en octubre del año pasado, está previsto que concluya próximamente", ha indicado el párroco.