Pide al Gobierno una baremación del número de vecinos por metro cuadrado que se pueden empadronar en una casa
MADRID, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró hoy que las pretensiones del Ayuntamiento de Vic (Barcelona) de negar el empadronamiento a inmigrantes en situación irregular son "ilegales", ya que, "de acuerdo a la normativa, el padrón no se fija según la situación de legalidad o ilegalidad de la estancia en España de un extranjero, sino que sólo se exige la acreditación de la residencia y, como único requisito adicional, que la documentación acreditativa --pasaporte o tarjeta de residencia-- esté en vigor al hacer el trámite".
"Creo que la pretensión del Ayuntamiento de Vic de que, si no hay visado en vigor no se concede el empadronamiento, es hoy por hoy ilegal, y pienso que cualquier ciudadano que recurra esa decisión tendrá el amparo de los tribunales, y el Ayuntamiento se verá obligado a empadronarlo, dando la razón al demandado", añadió el primer edil en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Por otro lado, Ruiz-Gallardón pidió al Gobierno que modifique la legislación para establecer una baremación común a todo el país sobre el número de personas que pueden estar empadronados en un mismo domicilio de acuerdo a los metros cuadrados del mismo, para evitar situaciones "ficticias" en las que hay personas domiciliadas en una dirección en la que realmente no habitan.
El primer edil aseguró que "a efectos de empadronamiento hay que establecer no sólo un domicilio, sino que tiene que haber unas condiciones de habitabilidad real para evitar empadronamientos ficticios", pero añadió que "eso es algo que no se puede hacer desde la normativa municipal".
Sin embargo, el Ejecutivo local ya ha "solicitado al Estado que haya unos baremos para toda España, superados los cuales se pueda considerar que no se está reflejando la documentación administrativa de un empadronamiento real sino de una situación ficticia".
"En función de los metros cuadrados de un domicilio existe un límite de capacidad para albergar a un número de personas, y tiene que haber un criterio por normativa estatal a partir de cual los ayuntamientos no estemos obligados a realizar empadronamientos que físicamente sabemos que no pueden responder a la realidad por el número de personas domiciliadas en determinados pisos", matizó Gallardón.
Y es que los datos presentados ayer por el consejero de Inmigración y Cooperación de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, apuntan a que se está registrando un aumento de los llamados 'pisos patera' en toda la región como consecuencia de la crisis, situación que a juicio del regidor podría verse reducida sino solucionada con una medida de este tipo.
El objetivo, en definitiva, no sería otro que "cotejar que determinados empadronamientos responden a la realidad de la residencia, y no a una ficción", y no tiene nada que ver con la situación del Ayuntamiento de Vic.
