MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario del Alto Consejo para Derechos Humanos de Irán, Mohammad Javad Larijani, ha afirmado que el país persa es "pionero" en Derechos Humanos en el mundo y que apoya todo tipo de cooperación internacional en este campo.
Larijani ha señalado durante la 19ª reunión del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que Irán no permitirá que los mecanismos en este área se conviertan en una herramienta en manos de Estados Unidos y otros estados occidentales para ejercer presión política sobre países que se oponen a ellos, incluido Irán.
En referencia al informe publicado recientemente por el relator de Naciones Unidas Ahmed Shahid sobre la situación de los Derechos Humanos en el país persa, ha manifestado que Shahid ha fracasado a la hora de presentar la imagen real de Irán ante el mundo.
"En lugar de cumplir con sus funciones principales, Shahid ha concedido entrevistas a varios canales de televisión como si fuera una estrella de cine", ha valorado, según ha informado la cadena de televisión iraní Press TV.
"Para preparar un informe como ese, que está lleno de acusaciones sin base, el relator no necesita tomarse la molestia de viajar a Irán. Puede quedarse en Ginebra o Nueva York y visitar páginas web contrarrevolucionarias y simplemente copiar y pegar los contenidos", ha apuntado.
Por otra parte, ha subrayado que Irán ha establecido con éxito una democracia basada en la racionalidad religiosa en lugar de la democracia liberal occidental, lo que ha dicho que es una fuente de inspiración para otras naciones de la región.
Así, Larijani ha subrayado que el relator especial que sea enviado a Irán debe mostrar la realidad de la nación iraní y sus logros ante el mundo sin seguir las órdenes de los países occidentales.
El 17 de junio de 2011, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas nombró al ex ministro de Exteriores de Malvinas Ahmed Shahid como investigador para Irán. En su último informe, fechado el 7 de marzo, Shahid ha afirmado que Irán ha mostrado un patrón llamativo de violaciones de los derechos fundamentales. Por su parte, Teherán insiste en que el nombramiento fue selectivo, motivado políticamente e inaceptable.
