Actualizado 26/06/2007 15:40

Murillo dice que el PP ha recurrido la Ley de Igualdad porque considera a las mujeres "una minoría"

MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

La secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, consideró hoy que el Partido Popular ha impugnado la Ley de Igualdad porque trata a las mujeres "como una minoría", a la que adjudica el criterio del "cuidado y atención de los demás".

"Teníamos la sospecha, pero no la certidumbre de que iban a impugnar la Ley de Igualdad", reconoció Murillo durante la inauguración del II Seminario Internacional 'La Participación de la mujer en los países de tradición islámica'. El Grupo Popular del Congreso presentó el pasado miércoles, 20 de junio, un recurso ante el Tribunal Constitucional contra esta ley.

Según Murillo, la Ley de Igualdad ha sido impugnada porque "han colocado" a las mujeres "del lado de las costumbres y del lado de la identidad" y las "han tratado como una minoría". Para convertir a las mujeres en minoría, explicó, se ha utilizado el criterio de "la identidad relativa al cuidado y a la atención de los demás".

Murillo explicó que para colocar a las mujeres "del lado de la identidad de las costumbres" es necesario "contar con el aval de que el resto de la opinión pública entiende que tenemos unas caracteristicas diferentes a los hombres, que son los que representan curiosamente siempre el 'gran universal', y que nunca bajo ningun concepto se agrupan en torno a una minoría".

Asimismo, discutió el argumento planteado para la impugnación que plantea que no se puede introducir a todos los colectivos vulnerables, por ejemplo a las personas ancianas, o a las personas con discapacidad. "Se nos está colocando de ese lado, del lado de la identidad, haciendo una curiosa conversión, convirtiéndonos en una minoría", indicó.

Según Murillo, las mujeres no son "una minoría en ningun caso excepto en aquellos" en que tengan "algún rasgo" que las sitúe como "un grupo vulnerable, es decir, mujeres con discapacidad o mujeres que tengan o sufran violencia de género, por ejemplo".

En este sentido, consideró que el concepto de identidad debe ser "muy reflexionado", para estudiar cuáles son sus efectos "a la hora de trabajar la posición de las mujeres en la esfera pública", porque si las mujeres no tienen autoridad en esta esfera, no será posible introducir dentro de la agenda politica "aquellos principios que defiendan la igualdad de oportunidades". "La identidad se convierte en la justificación primera para excluirnos del ambito público", sentenció.

Asimismo, pidió que se huya de la "coartada de vulnerables", que deja a las mujeres "fuera de los espacios de interlocución política". "No somos vulnerables, se nos hace vulnerables (...) para a continuacion excluirnos del debate donde se diseñan y se vertebran los objetivos de la agenda politica", agregó.