Actualizado 24/04/2007 16:08

Noruega- Noruega implantará medidas para reducir las emisiones de C02 en un 30% y luchar contra el cambio climático

El sector industrial del país aboga para que la reducción de emisiones se lleve a cabo en las economías de Asia y Europa del este


MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Noruega, Jens Stoltenber, anunció la pasada semana que el país nórdico está estudiando implantar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 30% para conseguir reducir los niveles actuales hasta alcanzar el objetivo de 'Emisiones Cero' previsto para 2050.

No obstante, Stoltenberg no especificó las medidas para conseguir que Noruega, uno de los mayores productores de petróleo, se convierta en un país líder en la lucha contra el cambio climático a pesar de que grupos ecologistas como Greenpeace han manifestado al respecto que "Noruega podría hacer mucho más para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero en su lucha contra el cambio climático".

El problema de esta propuesta se sitúa en el sector industrial, ya que éstos se han planteado qué porcentaje de reducción de emisiones se llevará a cabo en el país y cuál será el estándar previsto para las industrias con sede en países en desarrollo o fuera de las fronteras noruegas.

El sector industrial del país argumenta que las emisiones pueden ser eliminadas a un menor coste impulsando proyectos de energía limpia y reducción de emisiones de CO2 en las economías de Asia y Europa del este, en lugar de 'apretar' aún más al sector industrial del país nórdico.

Según el director del grupo medioambiental noruego 'Bellona', Frederic Hauge, "Noruega puede permitirse llevar a cabo proyectos en países en desarrollo e implantar medidas que permitan reducir las emisiones en estas regiones, pero además tiene la obligación moral de reducir también las emisiones en el propio país, ya que parte de su riqueza se la debe al petróleo".

Para Hauge se trata de "una oportunidad para guiar a la industria en un nuevo desarrollo medioambiental y tecnológico en uno de los países más ricos del mundo".

TECNOLOGÍA CCS

La industria noruega ha sido pionera en la implantación de la tecnología basada en la Captura y Almacenamiento de CO2 --CCS, por sus siglas en inglés-- con el yacimiento de Sleipner en el Mar del Norte, enterrando sus residuos en el fondo del mar. Pero es necesario según los expertos, "implementar mejoras tecnológicas para conseguir trabajar con la tecnología CCS a mayor escala".

El proyecto del primer ministro noruego contempla entre sus posibles medidas impulsar sus compromisos bajo el Protocolo de Kioto en favor de la lucha contra el cambio climático para el año 2012 y reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero un 30% para el 2020, lo que superaría el objetivo previsto por la Unión Europea que se sitúa en la reducción del 20%.

Sin embargo, el proyecto de reducir las emisiones domésticas está limitado porque casi el cien por cien de la electricidad del país está generada por energía hidráulica, la cual no produce casi dióxido de carbono. Eso significaría que las medidas se concentrarían entonces en el sector industrial y en los transportes.

En la actualidad las emisiones de Noruega se sitúan lejos aún de las metas previstas por Kioto para 2012, y el objetivo se sitúa ahora en introducir planes para crear nuevas plantas de energía eléctrica después de construir embalses en todos los ríos posibles para producir energía hidráulica.

Según Stoltenberg, la industria no tendrá que hacerse cargo de los costes para implantar estas nuevas medidas, ya que "es mucho más importante reducir las emisiones en el mundo que perjudicarnos a nosotros mismos".

Según los expertos, parte de la industria noruega se está resistiendo a la implantación de medidas de ahorro energético en el país hasta que el Gobierno no baje los impuestos existentes para los productores de carbón.

"Tenemos la mejor tecnología disponible para limitar las emisiones porque hemos vivido en el país con las mayores tasas del mundo por la emisión de CO2 desde finales de 1990", señaló el director de la Asociación Noruega de la Industria del Petróleo, Per Terje Vold.

Según Vold, "el coste de tecnologías adicionales aquí es mucho más alto que en cualquier otro país de Asia o Europa del este, por ejemplo". La misma inversión allí podría reducir las emisiones de gases de 10 a 20 veces más", puntualiza.

Por su parte, los sindicatos están preocupados por la reducción de puestos de trabajo que podrían suponer estas medidas en la industria del país, pero a la vez piden que Noruega actúe para neutralizar las emisiones de CO2.

"Lo que necesitamos es reducir las emisiones y cambiar el pensamiento de los individuos", es decir, "una solución a largo plazo", concluyó el representante del Instituto de Investigación Medioambiental Tyndell, Asher Minns.