MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
El festival de música Rock in Río 2008, que se celebrará en esta edición en Madrid y Lisboa, tendrá "el primer escenario solar de la historia de la música", que ha sido definido por la organización como "la primera medida" que se adoptará para concienciar a toda la sociedad de la necesidad de cambiar de actitud ante el problema del cambio climático, tema central del proyecto social de Rock in Rio 'Por un mundo mejor', informó hoy la organización.
En concreto, el escenario Mundo posee una estructura equipada con un equipamiento de luz, sonido y elementos escenográficos que cambian cada edición para recibir a los artistas. Así, para montar y desmontar esta estructura es necesaria la utilización de equipamientos que consumen mucha energía, incluido un equipamiento electrónico, de iluminación y de climatización. Para reducir las emisiones de carbono del festival, en 2008 todos estos equipamientos utilizarán energía renovable.
Así, un total de 120 paneles fotovoltaicos utilizarán la energía del sol para producir, a lo largo de 80 días de trabajo, un total de diecinueve mil kilowatios hora de electricidad, el equivalente al consumo diario de una ciudad de 2.500 habitantes. Con esta medida, Rock in Río evitará la emisión para la atmósfera de cerca de nueve toneladas de CO2.
Además, después del festival, los paneles solares permanecerán instalados en la ciudad que se construirá especialmente para el evento, y producirán cerca de 60 mil kilowatios hora de electricidad por año, lo que evitará, en el mismo periodo, la emisión de 30 toneladas de CO2.
Con este plan de reducción de emisiones, Rock in Río 2008 actuará sobre tres aspectos concretos, que son los principales productores de dióxido de carbono durante la preparación y desarrollo del festival: el consumo de energía, la movilidad de los asistentes y los residuos generados, informó la organización.
Respecto al desplazamiento del público (responsable de más de la mitad de las emisiones de carbono), el objetivo de la organización es promover el uso del transporte público para lo cual se facilitarán autobuses y trenes especiales los días del festival y se propondrá a los asistentes compartir sus vehículos para desplazarse hasta los conciertos.
Asimismo, la organización quiere desarrollar un plan que promueva la utilización de materiales reutilizables y aumente significativamente la tasa de reciclaje de los residuos producidos.
El creador del festival, Roberto Medina, ha explicado que una vez terminado el festival se plantarán "miles de árboles para compensar las emisiones que no pueden ser eliminadas" y, además, se destinará entre el dos y el cinco por ciento de los ingresos por venta de entradas para proyectos nacionales de educación sobre el cambio climático.
