PONTEVEDRA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Pontevedra ha suspendido por tercera vez el juicio contra un hombre acusado de abuso sexual a una menor debido a la incomparecencia del abogado de la defensa por estar enfermo.
Así, ésta ha sido la tercera vez en la que los menores, acompañados de sus padres, acuden a Pontevedra desde la localidad de Crecente hasta la Audiencia Provincial para acudir a un juicio que nunca se celebra.
El acusado, José Luis F.V., acudió tras ser detenido por la Guardia Civil, a instancias del juez, aunque no se encuentra en prisión. Este vecino de Crecente, al que se le imputan tocamientos a una menor de 12 años en julio de 2010, será juzgado finalmente el 29 de enero en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
El letrado de la defensa a última hora presentó un escrito solicitando el aplazamiento de la sesión alegando una baja médica. Al respecto, el abogado de la acusación, Marcos Martíns López, lamentó que se les "hizo venir hasta aquí sabiendo que no se podía celebrar el juicio", por lo que están "bastante enfadados".
Al respecto el letrado ha manifestado que los familiares y los niños, la afectada y tres testigos han perdido una jornada de trabajo y de colegio, además de los gastos. En todo caso, lo que más les preocupa es "el estrés que genera el tener que revivir todo lo ocurrido".
El abogado de la menor afirmó que la menor estuvo en tratamiento psicológico y tiene secuelas de estrés postraumático. La vista estaba prevista para el pasado mes de junio y el fiscal pidió medidas disciplinarias contra el letrado de la defensa.
Según relata el escrito de acusación de la Fiscalía, el acusado supuestamente se había acercado a la menor durante las fiestas que se celebraban en la Plaza da Carballeira, en Albeos (Crecente) y, "con la finalidad de procurarse satisfacción sexual", introdujo una pelota de tenis en el interior del jersey de la niña, tras lo cual le realizó una serie de tocamientos en sus pechos.
Por ello, el Ministerio Fiscal sostiene que estos hechos son constitutivos de un delito de abuso a un menor y solicita cuatro años de prisión para el procesado.
