AI y CIJ califican de "histórica" la condena de TEDH a Macedonia por el caso de Jaled el Masri

MADRID 13 Dic. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) y la Comisión Internacional de Justicia (CIJ) han calificado este jueves de "histórica" la resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de condenar al Gobierno macedonio al pago de una indemnización de 60.000 euros por la "tortura" y los "malos tratos" que sufrió Jaled el Masri, el ciudadano alemán de origen libanés que fue detenido y entregado de forma extrajudicial a la CIA en el marco de la lucha contra el terrorismo.

"La resolución hecha pública hoy sobre la detención y entrega a la CIA del ciudadano alemán Jaled El Masri marca un momento histórico, ya que es la primera vez que se hace responsable a un Estado europeo de su participación en los programas secretos dirigidos por Estados Unidos, y supone un hito en la lucha contra la impunidad", han asegurado Amnistía Internacional y la Comisión Internacional de Juristas en un comunicado conjunto.

"Esta sentencia confirma el papel que Macedonia desempeñó en el programa de entregas y detenciones secretas de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), y es un paso importante hacia la rendición de cuentas por la complicidad europea en las entregas y la tortura", ha manifestado Julia Hall, experta de Amnistía Internacional en lucha contra el terrorismo y Derechos Humanos.

No obstante, las dos organizaciones han recordado que Macedonia no actuó "sola" y que "muchos otros gobiernos europeos actuaron en connivencia con Estados Unidos para secuestrar, transferir, hacer 'desaparecer' y torturar a personas en el transcurso de operaciones de entrega". Por ello, han advertido, "esta sentencia constituye un progreso, pero aún queda mucho más por hacer para garantizar la rendición de cuentas en toda Europa".

En este sentido, el comunicado advierte de que otros gobiernos europeos --como Polonia, Lituania y Rumanía, contra los que existen también causas pendientes ante el Tribunal-- "deben tomar nota de la sentencia anunciada hoy por el Tribunal Europeo", y tomar medidas "para garantizar que se revela la verdad, que se llevan a cabo investigaciones exhaustivas, efectivas, independientes e imparciales y que los responsables rinden cuentas".

Aparte, prosigue el texto, "la resolución del Tribunal sirve también para poner de manifiesto la ausencia de remedio y rendición de cuentas en Estados Unidos, al señalar que la demanda presentada por Jaled El Masri contra la CIA fue desestimada por los tribunales estadounidenses después de que el gobierno de Estados Unidos invocara 'privilegio de secretos de Estado'".

TORTURA Y DESAPARICIÓN FORZADA

La resolución, según el secretario general de la CIJ, Wilder Tayler, "reconoce que el sistema de entrega y detención secreta de la CIA implicaba tortura y desapariciones forzadas", subraya que tanto las víctimas como la opinión pública "tienen derecho a conocer la verdad sobre estas graves violaciones" y pone de manifiesto, "sin lugar a dudas", que Europa "no puede ser una zona de impunidad, sino que debe ser un lugar de reparación y rendición de cuentas en el que se cumplan las obligaciones establecidas por el Derecho Internacional".

Las dos organizaciones han recordado que las autoridades macedonias detuvieron a Jaled el Masri, un alemán de ascendencia libanesa nacido en 1963, el 31 de diciembre de 2003, después de que hubiera entrado en Macedonia desde Serbia.

Las autoridades del país balcánico mantuvieron recluido en un hotel de Skopje en régimen de incomunicación y tanto en el hotel como en el aeropuerto internacional de la capital lo sometieron a desaparición forzada, interrogatorios reiterados y malos tratos hasta el 23 de enero de 2004, cuando lo entregaron a agentes de la CIA.

Los jueces del TEDH también han considerado probada "la ausencia de una investigación efectiva por parte de las autoridades de Macedonia sobre las alegaciones de malos tratos formuladas por el demandante".

Como parte del programa encubierto de entregas y detenciones secretas dirigido por Estados Unidos, la CIA trasladó a Jaled El Masri a un centro secreto de detención en Afganistán. Allí permaneció recluido ilegalmente en secreto, sin que se le acusara de ningún delito y sin que su detención fuera objeto de revisión judicial.

El detenido, según AI y CIJ, no tuvo acceso a un abogado y permaneció recluido en régimen de incomunicación, sin que se reconociera su paradero, a consecuencia de lo cual "estuvo más de cuatro meses sometido a desaparición forzada".

Aparte, "mientras estuvo en Afganistán sufrió tortura y otros malos tratos", añadieron. El 28 de mayo de 2004, Jaled El Masri fue metido en un avión y trasladado a Albania, donde quedó en libertad.