Actualizado 26/08/2011 20:25

AI denuncia que las fuerzas de Gadafi han ejecutado esta semana a decenas de prisioneros rebeldes


MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) asegura que tiene en su poder pruebas de que las fuerzas del líder libio Muamar Gadafi han matado esta semana a numerosos prisioneros rebeldes que se encontraban detenidos en dos campamentos militares de Trípoli.

Testigos entrevistados por la ONG informan de que las fuerzas leales al coronel emplearon, entre el 23 y el 24 de agosto, granadas de mano y armas de fuego para acabar con la vida de "decenas" de prisioneros en uno de los campamentos, mientras en el otro un grupo de guardias ejecutaron directamente a cinco detenidos que se encontraban en régimen de aislamiento.

A la luz de estas evidencias, Amnistía insta a los leales a Gadafi a que "detengan inmediatamente los asesinatos de los prisioneros" y pide a ambas partes que "prometan que los presos bajo su custodia no sufran daño alguno".

La ONG denuncia la "flagrante" falta de respeto de las fuerzas de Gadafi por la vida humana y el derecho internacional con un comportamiento merecedor de la categoría de crimen de guerra.

AI procede a describir cómo varias decenas de prisioneros rebeldes perdieron la vida la noche del pasado 23 de agosto cuando más de 160 de los detenidos fueron engañados por dos guardias que les aseguraron que las puertas del campamento-prisión de Jilit al Ferjan --al suroeste de Trípoli-- se hallaban abiertas. Nada más abalanzarse sobre las compuertas del hangar donde estaban recluidos, otros dos guardias abrieron fuego y lanzaron hasta cinco granadas de mano contra los prisioneros apelotonados.

Sobrevivieron al menos 23 presos, según indicó uno de los prisioneros, Hussein al Lafi. Tres de sus hermanos, todos detenidos el pasado 29 de junio bajo sospecha de simpatizar con la oposición, murieron en la masacre.

La segunda matanza tuvo lugar un día después, a cinco kilómetros del campamento militar Qasr Ben Ghashir, donde cinco detenidos fueron ejecutados por los guardias leales a Gadafi, según informan varios liberados que aseguran haber escuchado cómo los soldados abrían las puertas de las celdas de los detenidos antes de disparar contra ellos.

El resto de los 75 detenidos en la sección organizaron un súbito plan para escapar de sus celdas, ante el pánico por la posibilidad de seguir el mismo destino que sus compañeros. Tras lograr escapar de los compartimentos, pudieron llegar a la escena de los crímenes, pero los guardias ya habían desaparecido.

Entre los fallecidos se encuentran dos médicos, uno de ellos posiblemente identificado como Ali al Darrat, de Misrata, desaparecido el pasado mes de julio cerca del frente oriental de los combates.