LONDRES, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) pidió hoy a la Misión de la ONU en Sudán (UNMIS) que coopere con el Tribunal Penal Internacional (TPI) comunicándole el paradero de dos dirigentes del Ejército de Rsistencia del Señor (LRA) Okot Odhiambo y de Dominic Ongwen, con el fin de facilitar su detención y entrega.
En una carta dirigida al representante especial del secretario general para Sudán, Amnistía Internacional expresó su preocupación por las noticias según las cuales la UNMIS está dispuesta a ayudar a devolver a ambos hombres a Uganda, su país de origen. Las autoridades ugandesas han declarado reiterada y públicamente que no detendrán ni entregarán a los líderes del LRA al Tribunal Penal Internacional.
"La UNMIS está vinculada al Acuerdo de Relación entre el Tribunal Penal Internacional y las Naciones Unidas, que exige que ambos órganos cooperen estrechamente entre sí", declaró Martin Macpherson, del Programa de Derecho Internacional y Organizaciones Internacionales de Amnistía Internacional.
"Si la UNMIS entregase a los dos hombres a las autoridades ugandesas, la ONU ayudaría de hecho a impedir su detención y entrega al TPI, lo que equivaldría a una obstrucción de la justicia", añadió.
Amnistía Internacional instó a la UNMIS a que entregue inmediatamente al Tribunal Penal Internacional, así como a la Misión de la ONU ante la República Democrática del Congo (MONUC), toda la información sobre el paradero de Odhiambo y Ongwen a fin de facilitar su detención y entrega al TPI. La misma información debe ser comunicada a cualquier Estado que pueda detener y entregar a los sospechosos a la Corte y esté dispuesto a hacerlo.
La organización pide asimismo a la UNMIS que no facilite el retorno de los dos hombres a Uganda a menos que este país se comprometa a detenerlos inmediatamente y a entregarlos al TPI.
La orden de detención internacional emitida contra Okot Odhiambo incluye diez crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra, como asesinato, esclavización y reclutamiento forzoso de niños y niñas. La dictada contra Dominic Ongwen enumera siete crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra, incluidos asesinato, esclavización y actos inhumanos.
Se cree que entre el año pasado y los primeros meses de éste, las fuerzas del LRA han secuestrado a cientos de personas, mujeres y niños incluidos, y han cometido varias violaciones de derechos humanos más, incluidos homicidios ilegales, en la República Democrática del Congo, Sur de Sudán y la República Centroafricana.