MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del sindicato independiente de profesores ANPE, Nicolás Fernández, reclamó hoy, con motivo de la celebración del Día del Docente, "mayor respeto y reconocimiento" a la labor que desarrollan los maestros vinculado a un incremento en la calidad de la enseñanza, que pasa por recuperar en las aulas la filosofía de que "todo aprendizaje requiere un esfuerzo".
Por ello, en declaraciones a Europa Press TV, criticó que las modificaciones educativas llevadas a cabo por el Gobierno socialista vayan "en la dirección contraria", es decir, en el camino de reducir los niveles de exigencia.
En este sentido, mencionó, por ejemplo, la reforma en cuanto al número de asignaturas suspensas con las que un alumno puede pasar de curso, que se han elevado hasta cuatro. En su opinión, habría que "reforzar lo básico", asignaturas como la lengua, las matemáticas o la lectura.
Fernández también demandó que junto a las medidas académicas se produzca una "implicación real en los problemas del profesorado". Al respecto, indicó que "el mapa escolar ha cambiado mucho" en los últimos años, debido sobre todo a la llegada de inmigrantes de diferentes países, con lengua y niveles de formación diferentes.
Esta nueva situación ha requerido más esfuerzo por parte del profesorado, "cuya ilusión ha conseguido que en el día a día en las aulas se superen las dificultades", pero según Fernández, las administraciones públicas deberían sumar a esto "más medios materiales y humanos", creando aulas de enlace, y contratando más profesores de apoyo y refuerzo.
Para el presidente de ANPE, el compromiso con la educación requeriría un esfuerzo mayor en los Presupuestos Generales del Estado, que para el próximo año se sitúa en el 3,2 por ciento, cantidad que supera la partida anterior, pero todavía se encuentra alejada de la media europea.
RECUPERAR LA AUTORIDAD.
Respecto a los problemas de convivencia presentes en las aulas, Fernández demandó la modificación del actual régimen interno de los centros, terreno en el que "ya se han dado pasos", pero en el que hay que continuar trabajando si se quiere lograr que el profesor "recupere su autoridad".
La puesta en marcha del Observatorio de la Violencia Escolar, y por parte de ANPE, del teléfono del Defensor del Profesor, se han convertido en vías con las que los docentes cuentan cuando se presenta un problema.
No obstante, para Fernández, la oportunidad perdida para solucionar gran parte de los conflictos escolares hubiese sido el Estatuto del Profesorado en el que se ha estado trabajando desde hace meses. "Hubiese sido el instrumento motivador en el reconocimiento de la labor del docente", añadió.
De momento, dijo que no ha sido así, ya que el último borrador del texto que el Ejecutivo ha presentado a las asociaciones de profesores ha resultado "decepcionante", pues "no recoge muchas de las medidas acordadas y habladas con los sindicatos".
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