MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Asociaciones pro vida señalaron hoy que las clínicas que practican abortos han estado hasta ahora "amparadas" y no se han investigado sus posibles irregularidades a la hora de llevar a cabo abortos, se felicitaron por los registros y detenciones por parte de la Guardia Civil en las clínicas del doctor Carlos Morín, que incluyen a cuatro personas, entre ellas al propio Morín, y aseguraron que deberían investigarse otras clínicas de España.
El director de la Fundación Vida, Manuel Cruz, aseguró en declaraciones a Europa Press que los médicos que practican abortos "han estado hiperamparados hasta ahora", ya que "nunca ha habido investigaciones" desde que se despenalizó el aborto en España.
Según señaló Cruz, las detenciones practicadas hoy en varias clínicas de Barcelona después de realizar varios registros, "es más de lo que se ha hecho nunca" y afirmó que los médicos que practicaban abortos "se sabían protegidos", pero "eso se ha acabado".
"Llevamos veinte años viendo cómo las denuncias se archivaban", aseguró, para añadir: "Ahora las clínicas también están bajo el Estado de Derecho". Según dijo, las investigaciones llevadas a cabo por jueces no han llegado a ninguna conclusión, a pesar de que, para Cruz, "existían indicios claros de que se estaban cometiendo irregularidades".
Por su parte, la portavoz de la Fundación Red Madre, Esperanza Puente, señaló que "hay suficientes indicios" de que se cometían ilegalidades en los centros, aseguró sentirse "satisfecha" de que "se investiguen estos centros" y afirmó que "hay abortos ilegales desde el principio".
Puente denunció que "hay informes psicológicos estándar para todas las mujeres", por lo que afirmó que "esto es un coladero". Según afirmó, "cualquier tipo de legislación que permita de alguna forma el aborto hace daño a las mujeres y a la salud reproductiva de la mujer".
"Ojalá se sigan investigando otros centros en toda España", afirmó, y señaló que se ha presentado una denuncia contra la madrileña clínica Isadora por supuestos abortos ilegales, que podrían incluir "la muerte de dos niños fuera del útero materno, a los que se dejaron morir".
"Están ganado dinero unas pocas personas a costa del sufrimiento de las mujeres y de la sangre de nuestros hijos", aseguró Puente, que se sometió ella misma a un aborto en la clínica Dátor. "Lo que la gente no sabe es que hay que regular el consentimiento informado, que no se cumple en los centros en los que se practican abortos", afirmó, y señaló que Dátor también cuenta con una denuncia por supuesta ocultación de ingresos por los abortos. "Declararon en el año 2003 unos beneficios de sólo 3.000 euros, y eso no tiene sentido", aseguró Puente.
