MADRID 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
La situación humanitaria sigue siendo preocupante en el norte de Malí, especialmente en el extremo noreste, donde los desplazados por el conflicto entre el Gobierno y los grupos islamistas no tienen agua ni alimentos, según ha denunciado este lunes el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en un comunicado.
"El país se encuentra ante una situación humanitaria difícil" ha afirmado el jefe de la delegación regional del CICR para Malí y Níger, Jean Nicolas Marti. "En el norte, el acceso al agua potable sigue siendo la principal preocupación, tanto para las personas que se desplazaron recientemente de Tin Zauatene, cerca de la frontera con Argelia, así como en los centros urbanos de Menaka, Tombuctú o Gao", ha añadido.
Los equipos del CICR y de la Cruz Roja Maliense han realizado una distribución de bidones y tabletas para purificar el agua en favor de unas 5.400 personas desplazadas en la comuna de Tin Zauatene. Además, se están realizando obras de rehabilitación de pozos en Akharabane y Achibriche, lugares próximos a la frontera argelina que acogen a personas desplazadas. La situación es sumamente preocupante, sobre todo porque la población local debe compartir sus magros recursos con los recién llegados, ha precisado el CICR.
APOYO A LAS FAMILIAS DESPLAZADAS
Por otro lado, los equipos humanitarios han entregado 3.000 litros de combustible para la estación de bombeo de Menaka, localidad de unos 23.000 habitantes, a fin de permitir su funcionamiento. En Gao, se entregaron unos 20.000 litros.
En Tombuctú, una ciudad de unos 40.000 habitantes, se han enviado unos 33.000 litros de combustible para facilitar el abastecimiento de agua potable. Con este apoyo, la ciudad cuenta ahora con una reserva suficiente de agua para las próximas 3 o 4 semanas. El CICR vela por el abastecimiento de agua en las principales ciudades del norte de Malí, Gao, Tombuctú y Kidal, desde comienzos de 2012.
El CICR y la Cruz Roja Maliense han distribuido artículos de primera necesidad (lonas alquitranadas, artículos de aseo personal, utensilios de cocina, ropa, mosquiteros, etc.) para unas 4.000 personas desplazadas en Tin Zauatene. Por otro lado, en los próximos días está previsto distribuir unas 165 toneladas de víveres para 9.000 personas.
ATENCIÓN A LOS HERIDOS y DETENIDOS
Tras los recientes combates que tuvieron lugar en Gao, el hospital que recibe apoyo del CICR tuvo que atender a trece nuevos heridos. En ese centro médico de referencia para la región, se atendieron 341 consultas, 46 hospitalizaciones y doce partos la semana pasada.
Además, desde que se reanudaron las hostilidades en Malí, se ha informado de numerosos arrestos. El CICR mantiene el diálogo con las partes en conflicto para tener acceso a todas las personas arrestadas y detenidas en relación con las hostilidades, en todo el territorio maliense.
Los delegados del CICR han podido visitar a personas detenidas por las autoridades malienses en Mopti, Sévaré y Bamako, a fin de evaluar las condiciones de detención y el trato que reciben los detenidos. Las eventuales observaciones y recomendaciones serán comunicadas a las autoridades, en el marco del diálogo bilateral y confidencial que el CICR mantiene con ellas.