Actualizado 01/08/2007 17:06

Un experto dice que los proyectos humanitarios deben ser "sostenibles" en el tiempo para el desarrollo de África

PAMPLONA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -

El ex ministro de Educación de Namibia y actual consultor de Educación del país, Louis Burguer, planteó hoy en Pamplona las tendencias que se apuntan para el futuro del África subsahariana por parte de la comunidad internacional y, en concreto, reivindicó que una de las más importantes tareas es que "haya un mantenimiento y continuación" en los proyectos de ayuda para que "sean sostenibles" a lo largo del tiempo.

Louis Burguer ofreció hoy en Pamplona una rueda de prensa con motivo de su participación en el curso de verano organizado por la Universidad Pública de Navarra con el título de '¿Puede la educación contribuir al desarrollo en África? ¿Qué aspectos correspondería considerar?'.

Burguer señaló que en los países donantes y las organizaciones internacionales "muchas veces han visto que se presentan problemas, sobre todo en la ejecución de los proyectos y los planes" y que aunque el proyecto se ha ejecutado bien, "no se ha pensado en el largo plazo", en una sostenibilidad, por lo que "no tiene una continuación y se diluye, desaparece". Es por esto por lo que se ha planteado ese objetivo de futuro de la continuidad de los proyectos.

Además, Louis Burguer, explicó que las ayudas tienen que tener como "objetivo fundamental la población realmente más pobre", que "esté presente también la cuestión de genero", es decir, que se tenga en consideración la situación de las mujeres y las niñas en África, que los programas se dirijan "también a problemas medioambientales" y que los proyectos "ayuden a mejorar la alta tasa de desempleo, que mejore el desarrollo económico del país, que la población esté mejor prepara para poder acceder a un mercado laboral".

Señaló también la dificultad "en muchos casos" de llevar a cabo estos proyectos por diferentes problemas. Los países receptores, por ejemplo, no cuentan a veces con las "infraestructuras necesarias o los recursos humanos suficientes para que esa ayuda consiguiera los resultados esperados", lo cual, explicó, hace que los países que envían estas ayudas se sientan "un poco defraudados".

Desde el punto de vista de los países receptores, señaló que "encuentran problemas o quejas de las agencias de los países donantes como la falta de coordinación para las agencias". En el campo de la educación explicó que "se suelen encontrar con hasta 20 organizaciones diferentes que tienen proyectos que están funcionando a la vez en un país". El tiempo y los recursos que requiere a nivel local para trabajar con ellos "no es realista y se dan casos de competencia porque todas creen que su proyecto es fundamental".

"MAYOR COORDINACIÓN".

Para este consultor de Educación, "una mayor coordinación entre las agencias y los países donantes sería muy deseable", por lo que pidió que "se consideren los contextos diferentes y estudiar bien cada situación contando mucho con los expertos locales" para adaptarse mejor a cada país.

Aun así, Burguer señaló que, en el África Subsahariana, "ha habido grandes mejoras en los últimos cinco años, ha habido progreso, desarrollo". Citó un informe publicado en 2006 del Banco Mundial que describe un crecimiento para África de un 5,5 por ciento.

Según el experto, este aumento proviene de las inversiones de las empresas extranjeras "que cada vez encuentran más seguro invertir en África", de donantes internacionales, ONG, agencias internacionales, entre otros, que "gestionan de forma muy eficiente y eficaz muchos de estos países y gobiernos".

Asimismo, esta mejora se refleja en que el acceso al agua potable, que en 1999 se situaba en el 49 por ciento de la población, llegó en 2002 al 58 por ciento. El acceso a servicios sanitarios, sobre todo acceso a baños, era en 1990 del 32 por ciento y en 2002 un 36 por ciento tenía acceso a estos servicios. También ha mejorado la población por médico. A pesar de ello, Louis Burguer advirtió de que las infecciones por VIH ascienden ya a 25 millones de africanos, y que se producen 2,2 millones de muertes al año por esta causa.

Burguer dijo que "aun así sigue habiendo problemas muy graves a solucionar" y que las poblaciones "más pobres del mundo siguen encontrándose en estos países africanos". Las pandemias como el VIH, malaria o tuberculosis "siguen teniendo una tasa de mortalidad muy alta", alertó.

Por eso, señaló, "la ayuda internacional ha sido y sigue siendo muy necesaria para mejorar los servicios sanitarios de los países y para ayudar tanto al desarrollo económico como en recursos humanos".

UNA VISIÓN ERRÓNEA DE ÁFRICA

Para este experto de Namibia, que ha trabajado con organismos de la talla de la UNESCO, la UE, organizaciones humanitarias, "sería un error tener una visión eminentemente negativa para todo el África Subsahariana, sencillamente porque la situación varía muchísimo de unos países a otros".

Louis Burguer explicó que en Europa y en los países desarrollados en general se tiene "una visión negativa del África subsahariana". "Lo que reflejan los medios en sus noticias es una visión dramática, con catástrofes, guerras e inundaciones", añadió.

Aunque reconoció que "es verdad que todos esos problemas existen", ya que hay muchos países en África que siguen teniendo "tremendos" conflictos como es el caso de Congo, Sierra Leona o Burundi, "también existen casos y países en África con gobiernos estables, buena administración, con avances, desarrollo, progresos y sin embargo no aparecen en los medios de comunicación".

En este marco resaltó el caso de su propio país, Namibia, que "sólo es independiente desde hace 17 años, tenemos buenos progresos" y, aunque no tiene buena agricultura debido a la irregularidad de las lluvias, cuenta con una gran explotación de la carne bovina y ovina. Namibia tiene "los mejores diamantes del mundo, uranio y un turismo muy fuerte" por lo que "económicamente estamos entre los mejores del continente".