HRW asegura que no hay justificación para no participar en la Conferencia de la ONU sobre el Racismo

Europa Press Sociedad
Actualizado: lunes, 20 abril 2009 13:34

MADRID 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

El anuncio realizado por el Gobierno de Estados Unidos de que no participará en la Conferencia sobre el Racismo convocada por la ONU, seguido por la decisión de Países Bajos, Nueva Zelanda y Australia de no asistir a la misma, daña los esfuerzos de la ONU para luchar contra el racismo, según denuncia hoy la organización defensora de los Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW).

La organización asegura que no hay justificación para haber tomado esta decisión porque el borrador de la declaración que se adopte en la conferencia incorpora totalmente las preocupaciones legítimas de la UE y de otros Gobiernos occidentales.

"La triste realidad es que los países que manifiestan querer evitar una repetición de la polémica conferencia sobre el racismo que se celebró en 2001 son ahora los únicos que provocan el colapso de un consenso global en la lucha contra el racismo", señaló la directora de actividades de HRW, Juliette de Rivero. "

El borrador, adoptado después de negociaciones preparatorias, no contiene referencias a Israel ni a Oriente Próximo, y rechaza el concepto de que las religiones pudieran ser difamadas o estar expuestas a una violación de sus derechos, según la organización. También reafirma la tragedia del Holocausto y condena el antisemitismo, además de proteger totalmente el derecho a la libertad de expresión tal y como lo define el Derecho Internacional, afirma y fortalece la petición para la protección de los derechos de los emigrantes y reconoce las diferentes formas de discriminación.

Algunos gobiernos han protestado por el documento porque reafirma el Programa de Acción y la Declaración de la conferencia sobre el racismo que se celebró en 2001 en Durban (Sudáfrica). Sin embargo, con la excepción de Estados Unidos, los gobiernos occidentales planean ahora boicotear la conferencia, según HRW. "Los Gobiernos que van a boicotear la conferencia han decidido poner las preocupaciones de las víctimas al final", manifestó De Rivero. "En vez de aislar las voces radicales, los Gobiernos han capitulado ante ellas", añadió.

La conferencia que comienza hoy en Ginebra y que terminará el próximo día 24, representa una oportunidad para avanzar más allá de la controversia que rodeó la celebrada en 2001. La revisión que se va a realizar debería sentar una visión constructiva y positiva para la lucha contra el racismo, señala la organización. En vez de esto, las decisiones de boicot tuvieron lugar a pesar del reconocimiento de los responsables estadounidenses de que la mayor parte de sus "líneas rojas" no han sido cruzadas, manifiesta HRW. "El boicot facilita el trabajo de aquellos que quieren que la conferencia fracase", lamentó De Rivero. "Los únicos que lo celebrarán serán aquellos que quieren minar los esfuerzos para derrotar al racismo y proteger los derechos", añadió.

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