MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
Miles de desplazados siguen sin recibir alimentos y atención sanitaria en la zona oeste de Costa de Marfil, en la frontera con Liberia, tras el conflicto postelectoral que enfrentó al ex presidente Laurent Gbagbo y al actual jefe del Estado, Alassane Ouattara, según Médicos Sin Fronteras (MSF).
La ONG ha advertido del crecimiento de los casos de malaria y del aumento de las disputas territoriales ante el gran número de desplazados que se encuentran en el oeste del país. Algunas localidades siguen vacías semanas después del fin del conflicto ya que sus habitantes se encuentran escondidos en las montañas, siguen en los campamentos de refugiados o han cruzado hacia Liberia.
Xavier Simón, jefe de misión de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Costa de Marfil, denunció que "muchos desplazados han sido víctimas de actos brutales de violencia o han visto a otras personas ser acuchilladas, quemadas o asesinadas".
"Algunos dicen que conocían a sus agresores y que temen que puedan estar todavía merodeando cerca de sus aldeas. Están aterrorizados ante la posibilidad de sufrir más violencia o venganzas, así que muchos deciden seguir escondidos en el monte o refugiarse en países vecinos", denunció. "Otros simplemente no tienen a donde regresar, puesto que sus hogares fueron reducidos a cenizas y sus cosechas destruidas", señaló.
MSF explica en el comunicado que muchas agencias humanitarias solo prestan ayuda en las ciudades, por lo que muchos ambulatorios siguen sin estar operativos en el oeste del país. La ONG explicó que realiza 5.000 consultas médicas diarias en esta zona del país, y que pretende abrir clínicas móviles en las regiones de Toulepleu y el sur de Bloléquin, en la frontera con Liberia.
Alrededor de 10.000 marfileños han cruzado la frontera en busca de refugio en Liberia, a donde siguen llegando pequeños grupos cada semana. Se distribuyen en pequeños campamento a lo largo de la frontera, aunque en muchos casos no se ha fijado como puntos de reasentamiento, por lo que no han recibido alimentos y bienes de primera necesidad. Además, las intensas lluvias están provocando que sea más difícil llevar comida a estos desplazados y el aumento de los casos de malaria.
MSF señala que un tercio de las consultas médicas que ha realizado en las zonas fronterizas entre Costa de Marfil y Liberia se debe a casos de malaria.
"Los refugiados en Liberia corren el riesgo de quedarse sin asistencia vital a menos que se trasladen a puntos concretos designados por las autoridades", explicó Simón.
"Es de vital importancia que la ayuda de emergencia se acerque a los lugares donde estas personas se sienten a salvo", añadió Simón. La ONG ya ha prestado atención médica a 95 personas en todo Costa de Marfil y a 27.000 refugiados desplazados en Liberia.