Actualizado 05/10/2011 10:09

La televisión siria entrevista a una mujer que según AI había muerto a manos de las fuerzas de seguridad


AMÁN, 5 Oct. (Reuters/EP) -

La televisión estatal siria ha emitido una entrevista con Zainab al Hosni, la joven de 18 años de edad que, según informó Amnistía Internacional, había sido decapitada, mutilada y desollada por un supuesto miembro de las fuerzas de seguridad sirias para presionar a su hermano, Mohammad Deeb, un activista.

"Estoy viva, en contra de lo que las mentirosas televisiones por satélite habían dicho", ha indicado la joven, que ha acreditado su identidad con lo que parecía ser un documento oficial.

La joven ha explicado que su familia no sabía que estaba viva porque se escapó hace dos meses de su casa huyendo de los abusos de sus hermanos y se refugió en la vivienda de un pariente.

Tras la aparición de Zainab, la televisión siria ha acusado a los medios de comunicación internacionales de "fabricar mentiras para servir a los intereses extranjeros". En la misma línea, la agencia de noticias estatal, SANA, ha señalado su intento de "minar" el programa de reformas del Gobierno de Bashar al Assad.

Por su parte, varios activistas han rechazado a través de las redes sociales la versión dada por la cadena estatal, alegando que la joven entrevistada es simplemente una parecida a la asesinada por las fuerzas de seguridad.

Para los medios de comunicación independientes ha sido imposible verificar la identidad de la mujer entrevistada, ya que desde que comenzaron las protestas, el pasado mes de marzo, el régimen sirio ha expulsado del país a la mayoría de los corresponsales.

LA VERSIÓN DE AI

En uno de sus últimos informes, Amnistía Internacional denunció la muerte de Zainab, supuestamente ocurrida el mes pasado en la ciudad de Homs, escenario habitual de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes.

Según su versión, la familia de Zainab encontró por casualidad su cadáver decapitado, mutilado y desollado en una morgue de esta ciudad cuando acudía a identificar el de su hermano.

Al parecer, ambos murieron mientras estaban bajo custodia policial, por lo que sus casos elevarían a 103 el número de fallecidos en estas circunstancias, según cifras de la organización humanitaria.