Actualizado 03/06/2009 18:07

Aborto.-Aído dice que le "sorprende" que Mayor Oreja no haya pedido perdón por "comparar" el aborto con abusos a menores

CÁDIZ, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, aseguró hoy que le "sorprende" que el candidato del PP a las elecciones europeas, Jaime Mayor Oreja, "compare el derecho a decidir de las mujeres con un delito abominable como es el abuso de niños" y que, además, "lo niegue, en lugar de pedir perdón a la ciudadanía como todos esperábamos".

En un acto electoral celebrado en Cádiz, la titular de Iguldad aseguró que desde su partido no pensaban que el candidato popular "pudiese llegar a tanto" con esa afirmación, criticando que no se haya disculpado ante la sociedad por ello. Criticó asimismo al PP, que, a su juicio, "trata de imponer su moral" y su actitud de "oposición permanente a todo aquello que supone un avance en materia de igualdad y ampliar derechos de ciudadanía".

En este sentido, recordó que el PP se opuso cuando se aprobó la vigente Ley del aborto y, sin embargo, "ahora la defienden como si ellos fueran los promotores" porque, a su juicio, "a los socialistas siempre les toca tirar del carro del progreso y consolidar conquistas que a los pocos años la derecha reivindica y defiende como intocables".

En cuanto al nuevo proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, Aído significó que su objetivo es "garantizar el derecho a la salud sexual y reproductiva para evitar embarazos no deseados", criticando que sea el aspecto "del que menos se habla".

Además, destacó que el proyecto de Ley "establece un límite donde no lo había", puesto que "el 97 por ciento" de las interrupciones voluntarias del embarazo se produce acogiéndose al supuesto de salud psíquica de las mujeres, "que no tiene ningún límite establecido en la legislación vigente".

Finalmente, hizo referencia a los ocho meses de trabajo dedicados a conseguir una Ley "equilibrada y moderna" que "garantiza seguridad jurídica a mujeres y profesionales sanitarios", porque, insistió, "no se puede permitir que un cuarto de siglo después de aprobación de la Ley, las mujeres puedan ser penalizadas por la dolorosa decisión de interrumpir un embarazo".