LUANDA, 26 Oct. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Angola se reservará el derecho a expulsar a los inmigrantes congoleños ilegales, especialmente los que vayan a Angola a participar en el comercio de diamantes, según declaró este lunes el ministro angoleño de Asuntos Exteriores, Assunçao dos Anjos.
Sus comentarios podrían provocar una nueva ola de deportaciones que terminó este mes después de que los responsables de los Gobiernos de ambos países se reunieran. Miles de personas, algunas sin ninguna pertenencia, fueron expulsadas de los dos países. "Es obvio que Angola nunca cederá el derecho de deportar a ciudadanos cuyas acciones no son beneficiosas para nuestro país", aseguró Dos Anjos, en comentarios a Radio Nacional de Angola.
Angola ha convertido en su objetivo a cientos de miles de inmigrantes congoleños que han conseguido introducirse en el país a través de la frontera porosa entre ambos para buscar diamantes en los ríos infestados de cocodrilos de las provincias Lundas. Pero este mes, la República Democrática del Congo (RDC) respondió de la misma forma, y expulsó a más de 20.000 angoleños. Muchos de ellos explicaron que llegaron a territorio congoleño durante la guerra civil que Angola vivió durante 27 años y que ya habían conseguido el estatus de refugiados.
De acuerdo con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), más de 160.000 congoleños han sido expulsados de Angola, que definió como "especialmente preocupante" el hecho de que un gran número había alegado su detención y traslado hasta la frontera a pesar del hecho de que llevaban documentos que certificaban su estatus. Esta agencia de la ONU también indicó que su necesidad más acuciante es el refugio, los alimentos y las medicinas, y que no hay suficiente agua potable.
