Compromís asegura que autorizar el fracking y Castor reflejan que los gobiernos "están vendidos a compañías energéticas"

VALENCIA, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

El grupo parlamentario Compromís ha asegurado este viernes que autorizar la técnica de fractura hidráulica o el proyecto castor frente a las costas de Vinaròs (Castellón) reflejan que los gobiernos "están vendidos a compañías energéticas".

La coalición ha expresado en un comunicado su "absoluto rechazo" a la aprobación por parte del Gobierno central "por la puerta de atrás del Senado" de una autorización "genérica" para la técnica de la fractura hidráulica en el Estado español.

Según ha señalado el portavoz adjunto de Compromís en las Cortes, Juan Ponce, "está más que comprobado que el fracking es una técnica muy peligrosa y además consideramos que ahonda en un modelo energético desfasado que solo tiene beneficios para unos pocos".

Compromís ha anunciado que presentará iniciativas en el parlamento valenciano para que la Comunidad Valenciana se considere "territorio libre de fracking, como ya han hecho otras comunidades autónomas como Andalucía, La Rioja o Cantabria".

Así mismo, pedirá la creación de una comisión especial de estudio en las Cortes "para que los valencianos y valencianas tengan conocimiento directo y a través de expertos de las repercusiones presentes y futuras que sobre el territorio que puede tener el fracking".

EXPERTOS INDEPENDIENTES

La coalición ha recordado que esta petición se suma a la realizada para la creación de una comisión sobre el proyecto Castor de inyección de gas del almacén marino. El diputado considera que ambas comisiones "tienen que contar con la presencia de expertos independientes sin ningún tipo de veto del partido mayoritario en la cámara --el PP--, ya que los estudios y los informes que elaboran las empresas y aprueban los gobiernos están demostrando que dejan mucho que desear".

Para Ponce, "toda la problemática relacionada con este modelo energético caduco, basado en la extracción y el consumo de combustibles fósiles, pone de manifiesto que tanto el anterior gobierno socialista, que autorizó el Castor, como el actual 'popular', que ha autorizado la técnica de la fractura hidráulica, están vendidos a las grandes compañías energéticas".