Actualizado 24/11/2010 11:34

El Consell de Mallorca saca la tarjeta roja al maltrato y muestra su rechazo a esta "vulneración de derechos humanos"

PALMA DE MALLORCA, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

Diferentes miembros del Consell de Mallorca, encabezados por la presidenta, Francina Armengol, han realizado un acto simbólico en la sede de la institución en el que han sacado la tarjeta roja al maltrato para, de esta manera, mostrar su rechazo a la violencia de género, lacra social que supone una "vulneración de derechos humanos" y que es una "losa que no permite el pleno desarrollo" de la sociedad.

Con motivo de la celebración este jueves del Día Internacional contra la Violencia de Género, la máxima dirigente de la institución insular ha leído un manifiesto consensuado entre todos los grupos políticos en el que ha hecho hincapié en el "compromiso" del Consell para conseguir la igualdad entre sexos.

Además, este "pequeño acto" -tal y como lo ha calificado Armengol- que ha contado con la presencia de, entre otros, la directora del Instituto Balear de la Mujer, Lila Thomàs, tenía como objetivo mostrar el pésame de la institución ante la muerte de 63 mujeres por violencia de género durante el 2010, dos de las cuales tuvieron lugar en Mallorca.

Así, la presidenta ha lamentado esta "vulneración de derechos humanos" referentes a la integridad física y moral, a la salud y a la seguridad de las personas.

Por otra parte, ha recordado que la Ley Orgánica de medidas de protección integral contra la Violencia de Género nació con el fin de otorgar derechos de asistencia social integral a las mujeres víctimas, y, además, incentivar la toma de conciencia de la sociedad contra estos crímenes, reforzando el respeto hacia las mujeres y haciéndolas recuperar la "dignidad arrebatada".

Finalmente, ha incidido en el trabajo realizado desde el Consell para que las políticas públicas incorporen la perspectiva de género en sus programas de acción. De esta manera, ha abogado por la transversalidad y las medidas de acción positiva, así como por llevar a cabo actuaciones concretas de sensibilización y prevención en materia de educación en los colegios. Además, ha defendido la promoción del uso no sexista del lenguaje y las acciones directas sobre el colectivo de mujeres víctimas de violencia.