Actualizado 17/11/2009 18:54

Copenhague.- Ecologistas acusa a EEUU de realizar un "boicot inadmisible" al eventual acuerdo contra el cambio climático


MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

La organización Ecologistas en Acción acusó hoy a Estados Unidos de realizar un "boicot inadmisible" a la Conferencia de las Partes de la ONU contra el cambio climático que se celebrará el próximo mes en Copenhague (Dinamarca) para acercar los resultados del eventual acuerdo a sus propios intereses, forzando así al fracaso de la cumbre.*

Así, reconoce que en los últimos meses el país norteamericano ha modificado "en algunas formas y contenidos" su política de cambio climático con respecto a sus anteriores gobiernos, pero asegura que "permanece actuando de igual manera en lo esencial".

La ONG denuncia en un comunicado que Estados Unidos "incumple las reglas" del multilateralismo de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y le acusa de tratar de "decidir el futuro de todos los habitantes del planeta a medida de sus intereses, reproduciendo así las nefastas prácticas de unilateralismo de las peores administraciones norteamericanas".

Por ello, insiste en que, a su juicio, "ningún motivo debe impedir" que de Copenhague salga un tratado "legalmente vinculante" porque la supervivencia de la mayor parte de la población mundial depende de ello.

"Cualquier desactivación del proceso internacional en el seno de la Convención sobre cambio climático, como la forzada por EEUU en la reunión de la Asociación Asia-Pacífico (APEC), puede suponer una rebaja en los compromisos que deben adoptar los países industrializados y la ruptura indefinida de las negociaciones bajo las reglas del consenso y la responsabilidad compartida pero diferenciada", acusa.

Igualmente, critica que China "hace un flaco favor a su población" porque pone en riesgo la posibilidad de llegar a un acuerdo vinculante en diciembre de 2010 cuando "algunas regiones" de su territorio son "especialmente sensibles" a los efectos del cambio climático, contradiciendo así la postura que defendió en la última reunión preparatoria de Copenhague, que se celebró en Barcelona del 2 al 6 de noviembre, donde apoyó a los países africanos en la exigencia de compromisos concretos a las naciones más industrializadas.