Actualizado 05/05/2009 19:11

La Eurocámara aprueba la norma que obliga a imponer sanciones penales a los buques que contaminan


ESTRASBURGO (FRANCIA), 5 May. (EUROPA PRESS) -

El pleno del Parlamento Europeo aprobó hoy por una amplia mayoría (588 votos a favor, 42 en contra y tres abstenciones) la norma comunitaria que obligará a los Estados miembros a imponer sanciones penales para los delitos de contaminación grave procedente de buques. El ponente parlamentario de la directiva es el eurodiputado del PP Luis de Grandes.

La legislación, que ya ha sido objeto de acuerdo con los Gobiernos, establece que también deberán imponerse sanciones de carácter penal en casos de contaminación leve si el delito de vertido es repetido, deliberado o resultado de negligencia grave o imprudencia temeraria. Los Estados tendrán un plazo de un año para aplicar la normativa.

El objetivo de esta iniciativa es disuadir a los transportistas marítimos que contaminan porque consideran que pagar una multa administrativa es más rentable que respetar la ley. La directiva pide a los Estados miembros que fijen penas "eficaces y disuasivas", no sólo para los propietarios de los buques sino también para cualquiera que pueda beneficiarse, como los propietarios de la carga o las sociedades de clasificación.

La UE ya cuenta desde el año 2005 con una directiva para castigar la contaminación procedente de buques y con una decisión marco que establece las sanciones para los responsables. Sin embargo, el Tribunal de Justicia de Luxemburgo (TUE) anuló en octubre de 2007 la decisión marco por considerar que su base legal era errónea. La sentencia afirmaba que la directiva puede exigir a los Estados miembros que establezcan sanciones penales para la industria del transporte, pero no fijar el tipo o el nivel exacto de las penas, algo que corresponde a cada país.

BUNKERING EN LA BAHÍA DE ALGECIRAS

Luis de Grandes afirmó a través de un comunicado que la nueva norma "constituye un traje a la medida para situaciones como la de la Bahía de Algeciras frecuentemente convertida en una cloaca por las ilegales prácticas de 'bunkering' y la irresponsable práctica de vertidos incontrolados cuya suma produce una grave contaminación".

En su opinión, la decisión de la UE de "elevar a rango de delito la conducta reiterada de infracciones menores es un paso decisivo contra la mala praxis de quien le resulta más barato pagar para contaminar". A partir de la entrada en vigor de la norma, la UE "habrá conseguido disuadir de toda transgresión a los contaminadores potenciales", subrayó De Grandes.