SEVILLA, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
La consejera para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, presentó hoy al Consejo de Gobierno el informe sobre el desarrollo de la Ley de Medidas de Prevención y Protección Integral contra la Violencia de Género en 2008. Se trata del primer documento de este tipo que la Junta de Andalucía remitirá cada año al Parlamento con el fin de evaluar la efectividad de sus políticas sobre la materia.
De acuerdo con este primer balance, que recoge las medidas desarrolladas por todos las consejerías, la Administración autonómica destinó el pasado año 27,9 millones de euros a la aplicación de las acciones previstas en la ley.
El área de protección y atención a las víctimas acaparó más de la mitad de este presupuesto, 14,5 millones, con medidas en los ámbitos de la educación, el empleo, la salud, la justicia, la igualdad y el bienestar social.
Los centros de acogida albergaron a 2.505 mujeres y menores a su cargo, el Servicio de Asistencia a las Víctimas de Delitos atendió a 11.851 personas y los Centros Municipales de Información a la Mujer asesoraron a otras 28.678 en asuntos relacionados con los malos tratos.
En el terreno de la recuperación integral de las víctimas, las medidas de la Junta propiciaron, entre otros objetivos, la inserción laboral de 440 mujeres y la atención a otras 2.090 por parte del Servicio de Defensa Legal. La inversión en este capítulo fue de 8,3 millones de euros.
Las acciones desarrolladas durante 2008 se completaron con los 3,9 millones de euros destinados a investigación, sensibilización y prevención, con especial atención a los proyectos de coeducación en centros escolares y las campañas informativas.
En Andalucía se registraron durante el pasado año 29.102 denuncias por violencia de género, presentadas en su mayor parte por mujeres de entre 21 y 40 años de edad. La tercera parte de los hombres denunciados eran cónyuges de la víctimas. En el mismo periodo, los juzgados de la comunidad autónoma acordaron 5.543 órdenes de protección de personas que habían sufrido malos tratos.