MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, anunció hoy, en el Senado, que en 2010 el Gobierno ofertará 350 nuevas plazas en la Unidad de Prevención, Asistencia y Protección (UPAP) de la Policía Nacional, que se unirán a los 541 efectivos que actualmente trabajan en la atención a las víctimas de maltrato "para reforzar la seguridad de las agredidas".
Según explicó, durante su comparecencia en la Cámara Alta, el incremento y la formación del personal de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad especializados en violencia de género supone "uno de los ejes principales" del Estado en la creación de medidas para combatir esta "lacra social". "Queremos mejorar las competencias técnicas de los profesionales y que desarrollen nuevas aptitudes", señaló.
No obstante, para Camacho la especialización en género "no puede ser sólo patrimonio de un grupo de agentes expertos, sino que debe abarcar a todo el cuerpo". "Nuestro objetivo es lograr que el verdadero eje de las actuaciones policiales sea la víctima y no el agresor", aclaró. Así, reconoció que, hasta el momento, estas unidades estaban "insuficientemente" dotadas para combatir el fenónemo.
Por otra parte, destacó que, entre el conjunto de nuevas medidas adoptadas en esta materia, destaca la aprobación de un nuevo manual de actuación para casos de violencia de género, que incorporará "enfoques novedosos" en la intervención con agresores y sustituirá a los existentes hasta el momento, tanto en el ámbito policial como en el penitenciario.
"Con el título 'Violencia de Género. Programa de intervención para agresores', el manual incorporará las experiencias y el trabajo llevado a cabo por diversos profesionales de entre las distintas policías autonómicas", señaló. En su opinión, esta iniciativa, que espera que se convierta en un referente en el marco de la UE, "servirá para unificar criterios de actuación".
EL 84% DE LAS RECLUSAS, VÍCTIMAS DE MALTRATO
Asimismo, subrayó la puesta en marcha "un plan específico de prevención de violencia de género dirigido a mujeres reclusas" pues, según explicó, el 84 por ciento de ellas "han sido en algún momento de sus vidas víctimas de maltrato".
"Las mujeres cárceles presentan un grado de antecedentes de abusos y malos tratos en su historial personal mucho más elevado que el de la población en general", aseguró. En este sentido, Camacho destacó la formación de una comisión de trabajo con diversos estamentos sociales que pretende reduccir los niveles de vulnerabilidad de este colectivo".
