MADRID 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, aseguró hoy que la escalada del conflicto en Afganistán ha tenido un "impacto significativo sobre los civiles", durante la presentación hoy de su informe anual sobre Afganistán ante el Consejo de los Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
"La intensificación del conflicto también ha provocado un aumento inquietante en las bajas civiles y ha reducido el espacio para la acción humanitaria", según el informe, que subraya las preocupaciones sobre el deterioro de la situación. Por su parte, la Alta Comisionada pidió a todas las partes un mayor respeto de la protección de civiles.
El informe también señala que aún es amplia en el país la violencia contra las mujeres como las violaciones, las "muertes de honor", el matrimonio forzoso y a edades tempranas, el abuso sexual y la esclavitud. "Las mujeres han avanzado recientemente en la espera pública, y las conquistas conseguidas están en peligro de desvanecerse", según el informe.
Otro de los puntos que destaca el informe es que "las amenazas y la intimidación contra las mujeres en la vida pública o contra quienes trabajan fuera de casa han visto un incremento dramático". Sobre uno de los éxitos del Afganistán postalibán, la libertad de expresión y la rápida expansión de los medios de comunicación en el país, el informe asegura que a lo largo del año pasado, esta libertad de expresión ha sufrido una amenaza significativa. "Los reveses que han sufrido los medios de comunicación, y los esfuerzos por mantener la libertad de expresión son dos de las grandes preocupaciones", señala.
El informe concluye que "los esfuerzos por transformar la sociedad afgana se vieron dañados seriamente por la intensificación del conflicto armado, la anarquía creciente, el abuso generalizado de poder, la violencia contra las mujeres y su persistente marginalización, así como unas restricciones significativas sobre la libertad de expresión".
El documento, además de asegurar que hay una falta de voluntad política para dirigir los "problemas arraigados" y que la "impunidad prevalece", también realiza siete recomendaciones al Gobierno afgano y a la comunidad internacional, incluido asegurar una mayor protección para los civiles, un compromiso para tratar con la impunidad y "urge firmemente" al Gobierno para que vuelva a instalar una moratoria sobre la pena de muerte.