MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, ensalzó hoy en el Senado la defensa de los derechos y libertades públicas que realiza el Defensor del Pueblo, durante la sesión solemne conmemorativa del 25 aniversario de la Institución. Igualmente, trasladó un mensaje de aliento y apoyo del Rey Juan Carlos a la "gran tarea de promoción" de la convivencia democrática en justicia y libertad que, desde su origen, ha desarrollado el Defensor.
"España, como país democrático, moderno, próspero y solidario, se enorgullece de poder disponer de una institución como el Defensor del Pueblo, cuyo XXV Aniversario hoy celebramos. Me alegra constatar con tal motivo, el sobresaliente grado de aceptación y madurez que ha alcanzado el Defensor del Pueblo en el marco de nuestro sistema constitucional de convivencia democrática", afirmó.
Asimismo, quiso expresar su gratitud a las personalidades que contribuyeron de "forma decisiva" al nacimiento y desarrollo de esta institución, a sus sucesivos titulares elegidos por las Cortes Generales para asumir la "importante" responsabilidad de personificarla, y a quienes han aportado a lo largo de este tiempo su "valioso trabajo y perseverante" entrega al buen funcionamiento del Defensor del Pueblo".
"Como heredero de la Corona, contáis con mi admiración y reconocimiento por vuestra tarea en defensa de los derechos y las libertades fundamentales, contribuyendo así a la construcción de una España cada vez mejor", añadió.
PREOCUPACIONES DE LOS CIUDADANOS.
Además, el Príncipe recordó que el Defensor recoge las preocupaciones de los ciudadanos, "especialmente de aquellos que encuentran mayores dificultades para hacer oír su voz". A su vez, destacó la relación de la Institución con las Administraciones y las situaciones difíciles ante las que el Defensor del Pueblo trata de acomodar actos y decisiones que, por una u otra razón, pueden afectar al pleno y efectivo ejercicio de los derechos constitucionales de los ciudadanos.
"En suma, el Defensor del Pueblo refuerza el papel de las instituciones clásicas de garantía, al tiempo que establece y perfecciona nuevos mecanismos al servicio de los derechos y libertades de los ciudadanos, haciendo prueba de su capacidad de adaptación a una realidad social compleja y en continua transformación", señaló.
Don Felipe también recordó la incorporación de esta Institución en "muchos países hermanos de la Comunidad Iberoamericana de Naciones" y la colaboración prestada por el Defensor del Pueblo de España a esta tarea, así como en otros muchos países del mundo inmersos en procesos de democratización o modernización de sus sistemas políticos.
Por su parte, el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, que quiso reconocer el trabajo realizado por sus predecesores, destacó que la "casi siempre razonable" colaboración de las administraciones públicas es la que ha dado los mejores frutos a la hora de dirimir controversias.
En la misma línea, el presidente del Senado, Javier Rojo, destacó el "símbolo de normalidad y madurez democrática que representa el Defensor del Pueblo, después de 25 años, y la "alta valoración y estima que recibe de la sociedad española. En el acto participaron también el Defensor del Pueblo Europeo, Nikiforos Diamandouros, así como los comisionados autonómicos y de distintos países latinoamericanos.
