Los talibán paquistaníes instan a las ONG a abandonar el valle del Swat

Rechazan que mujeres y hombres trabajen juntos y la vacunación contra la polio

Europa Press Sociedad
Actualizado: lunes, 23 marzo 2009 12:53

MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Un portavoz del grupo armado Tehrik e Taliban (TeT), Muslim Jan, emplazó a las ONG a abandonar el valle del Swat, bastión de la insurgencia islamista situado en el noroeste de Pakistán, en la región fronteriza con Afganistán.

"Vienen y nos dicen cómo construir letrinas en las mezquitas y las casas. Estoy seguro de que podemos hacerlo por nosotros mismos. No necesitamos que los extranjeros nos enseñen", afirmó Jan, miembro de la milicia islamista que recientemente logró un acuerdo de paz con el Gobierno, en declaraciones a la agencia de noticias de Naciones Unidas, IRIN.

"ONG es sinónimo de vulgaridad y obscenidad. No quieren que sigamos siendo musulmanes y pretenden quitar el velo a nuestras mujeres", aseguró Jan, quien también criticó que mujeres y hombres trabajen juntos en las ONG en las oficinas y sobre el terreno. "Es totalmente contrario al Islam e inaceptable", dijo.

El maulana Fazlulá, líder del grupo Tehrik e Nifaz e Sharia Mohammadi (TNSM), aliado del TeT, también emplazó a la expulsión de las ONG en un discurso radial el pasado 2 de marzo. "Todas las ONG deben abandonar Swat porque están generando problemas a la paz", dijo. Previamente, llegó incluso a calificar de "enemigos del país" a los paquistaníes que trabajan para las ONG.

Mientras, el Gobierno mantiene una postura conciliadora. "Respetamos el trabajo de las ONG, tanto las de aquí como las extranjeras", indicó un comisario de ayuda humanitaria de la Provincia de la Frontera Noroeste, a la que pertenece Swat, Jameel Amjad. "Ahora mismo estamos intentando una política de conciliación y las cosas han ido bien en Swat. Con el tiempo, cuando se normalice la situación, estoy seguro de que la labor de las ONG incluso se fortalecerá", dijo.

Roshan, uno de los miembros del Consejo de Participación del Swat, una ONG local, indicó que actualmente hay unas diez ONG activas en el valle del Swat. Ninguna de ellas se declara musulmana o islámica, todas ellas son organizaciones sin ánimo de lucro y no diferencian entre musulmanes y no musulmanes a la hora de distribuir ayuda, explicó.

De las extranjeras, sólo se permite la presencia de las organizaciones sanitarias. "Sólo se permite a Médicos Sin Fronteras (MSF), al Comité Internacional de la Cruz Roja y a ciertas organizaciones filantrópicas del país que proporcionan bienes a los desplazados internos", afirmó Jan, el portavoz talibán.

Un portavoz de la sección belga de MSF, Fasil Tezera, confirmó que la ONG ha reanudado sus labores en la zona a pesar de la interrupción de éstas posterior a la muerte de uno de sus trabajadores el pasado 1 de febrero.

Sin embargo, otras ONG locales han retirado sus emblemas de la zona a raíz del incremento de la violencia iniciado en 2007, aunque siguen trabajando con la aprobación tácita de los talibán, indicó Roshan.

Un director de instituto de Swat, Ziaudin Yusufzai, también comentó la actitud de los talibán hacia las ONG. "El TeT ve con desagrado a las ONG. Incluso rechazan los bienes de ayuda de ciertas organizaciones internacionales de ayuda por proceder de no musulmanes", explicó.

Badar Zaman, director del diario 'The Malakand Times' y antiguo director de una ONG asegura incluso que hay ciertas partidas de bienes y alimentos que permanecen almacenadas, a la espera de la aprobación del TeT. Sin embargo, aseguró que los talibán "no son corruptos", ya que, de nos se por su intervención, "los bienes ya estarían a la venta en el mercado de Mingora", la principal ciudad de la región de Swat.

Jan, el portavoz talibán, también destacó el rechazo del TeT a la vacunación contra la poliomielitis alegando que causa infertilidad, un mito extendido también en otras zonas de Pakistán. "Tengo 45 años y nunca me han metido ni una sola gota de la vacuna y aún sigo vivo", argumentó Jan.

Parte del problema radica en que la campaña contra la polio es desarrollada por las ONG y que estas vacunas son importadas, explicó Jan. "No tendríamos inconveniente si la vacuna se hubiera fabricado aquí, en Pakistán", dijo. Por último, arremetió contra cualquier fórmula extranjera de planificación familiar.

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