Actualizado 19/11/2009 10:52

Un total de 3.000 inmigrantes ilegales, desplazados en un pueblo de Sudáfrica por los ataques de sus vecinos

JOHANESBURGO, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

Ya son unos 3.000 los inmigrantes ilegales, la mayoría zimbabuenses, asentados en la localidad sudafricana de De Doorns (a unos 140 kilómetros al noreste de Ciudad del Cabo) después de que habitantes de la zona atacaran su barrio de chavolas, según advirtió este miércoles la Sociedad Africana de Cruz Roja, citada por la agencia de noticias humanitarias de la ONU (IRIN).

Cruz Roja ya ha hecho un llamamiento para reunir dos millones de rands (más de 179.000 euros) para proveer mantas, agua, alimentos, kits de primera necesidad, ropa, artículos de aseo, combustible y apoyo logístico.

El portavoz de Cruz Roja Kelvin Glen ya atendió el 15 de noviembre la solicitud de las autoridades locales de asistir a en torno a 80 personas, "pero los números se han elevado desde entonces". La mayoría de los desplazados están siendo enviados a una gran tienda instalada en la zona de deportes del municipios.

Muchos zimbabuenses huyeron tras los primeros ataques protagonizados ayer por vecinos de De Doorns, molestos por que muchos de los inmigrantes hubieran conseguido un gran número de puestos de trabajo en las granjas de la zona. La Policía asegura que la situación es estable por el momento.