Archivo - IA+Igual, una iniciativa presentada por CVA, IN2 y ORH para impulsar una Inteligencia Artificial más ética e igualitaria dentro del ecosistema empresarial - ORH - Archivo
MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
Expertos en gestión del Capital Humano han asegurado que la Inteligencia Artificial (IA) "nunca sustituirá a un profesional de Recursos Humanos de calidad", pero permite ofrecer un trato individualizado a toda la plantilla.
Esta ha sido una de las conclusiones de un reciente webinar de Campus IA+Igual --iniciativa impulsada por CVA, IN2 y ORH-- en el que la experta en People Analytics y miembro del Consejo Asesor de IA+Igual, Ana Valera, y el vicepresidente del sur de Europa de Cornerstone, Marc Altimiras, han respondido al interrogante: "¿Qué preguntar a un proveedor para contratar IA confiable".
Durante la sesión, según sus impulsores, se han clarificado las preguntas que se plantean los profesionales de Recursos Humanos a la hora de contratar herramientas de inteligencia artificial (IA). Por ejemplo, se han abordado cuestiones como si la calidad de un algoritmo depende del número de datos.
En este sentido, Altimiras ha explicado que, sin dejar de lado el volumen, "la clave está en los modelos de lenguaje de gran tamaño" -- LLM por su sigla en inglés-- que se usan para desarrollar un algoritmo en función de su caso de uso. Por ello, recomienda que se pida al proveedor la posibilidad de cambiar de modelo si no es adecuado, "respetando siempre la propiedad intelectual".
"Es importante saber si el fabricante tiene un compromiso sobre el desarrollo del tipo de IA que genera. El lenguaje que se tiene que hablar en la empresa es el de las habilidades, por encima de cualquier otro criterio adicional", ha afirmado el vicepresidente para el sur de Europa de la empresa proveedora de servicios de gestión del talento y formación.
En ese contexto, Altimiras ha expuesto algunos casos de uso de IA por parte de Cornerstone, como la creación de 'chatbots' o asistentes virtuales mediante IA Generativa que responden a preguntas frecuentes de los trabajadores de una manera más rápida o la redacción de descripciones de empleo que alivien la carga de trabajo de Recursos Humanos.
AUDITORÍA DE LOS SESGOS
Por su parte, Valera ha respondido a la pregunta de si se pueden combatir los sesgos con el uso de la IA, a lo que ha respondido que "a priori, no, pero se pueden mitigar". En este sentido, la experta en People Analytics ha señalado que "lo que resulta imprescindible es tener criterio y especificar cómo se regula su uso".
En concreto, la experta ha ilustrado esta idea a través de dos ejemplos: "es posible eliminar la edad para tratar de evitar un sesgo, pero esta se deduce de la trayectoria profesional; si se opta por los currícula ciegos para evitar el sesgo de género, permanecen muchos datos que ponen de relieve si el autor es un hombre o una mujer".
De este modo, la clave para la miembro del Consejo Asesor de IA+Igual es "auditar de forma constante" los algoritmos para que funcionen de manera justa y equitativa y actuar de forma ética para decidir qué usos no son adecuados "porque la IA va más rápido que la regulación". Alguna empresa puede "caer en la tentación" de reproducir sesgos como "busco mujer de 20 a 30 años", pero "debería introducir otras variables para evitar una crisis reputacional".
"En la era del pensamiento crítico --ha subrayado Valera-- la clave es seguir formándose para discernir los resultados que ofrecen los algoritmos. Ahora disponemos de un 'Ferrari' para tomar mejores decisiones, pero la persona tiene la última palabra".
Por ello, algunas de sus sugerencias del uso de IA en el área de talento son: crear 'coach' virtuales que ayuden al desarrollo de diferentes habilidades; seleccionar candidatos y predecir la posibilidad de éxito; personalizar la compensación analizando todos los beneficios o la propuesta de valor, entre otros, o detectar personas con mayor potencial y mejor desempeño de forma más objetiva que una persona.
A su juicio, se pueden mitigar los sesgos a través del "entrenamiento continuo" del algoritmo y la "depuración cuando sea necesario". "El tiempo gastado en entrenar la IA es como el que se dedica a un becario: una inversión", ha concluido Valera.