ALICANTE, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Vicario Episcopal de zona, Fernando Rodríguez, anunció hoy que la Diócesis Orihuela Alicante "publicará en breve" un documento pastoral sobre la crisis, elaborado por el Consejo Diocesano de Pastoral y el Colegio de Arciprestes, y en el que se plantean propuestas operativas que está poniendo en marcha la Diócesis para paliar la crisis económica, como que la economía se apoye en la ética "para estar al servicio del hombre y conseguir así pasar de condiciones menos humanas a más humanas".
Fernando Rodríguez hizo estas declaraciones hoy durante una rueda de prensa en el Obispado de Alicante, en la que anunció este documento e indicó que el documento propondrá "criterios morales" para afrontar las posibles salidas de la crisis considerando que "la primacía del trabajo es un derecho de todo hombre", que lo "realiza como persona y lo dignifica". También propone que se considere "el bien común como un criterio ético" para regir el mercado, así como un sistema financiero que favorezca "el desarrollo de todos los hombre".
Este documento también marcará líneas de actuación para las parroquias de la Diócesis, entre las que se encuentra "favorecer el estudio de la Doctrina Social de la Iglesia, potenciar la coordinación de las Caritas parroquiales e incrementar la presencia y la participación de los católicos en la vida pública".
En este sentido se han planteado desde la Diócesis distintas iniciativas solidarias como entregar la paga extra del mes de julio; contener los gastos del presupuesto diocesano y parroquial, para poder destinar más fondos a la acción caritativa y social; entregar un día de sueldo al mes para apoyar a las víctimas de la crisis y aportar pisos de acogida para familias desahuciadas.
EL EMPLEO EN LA PROVINCIA
Durante la rueda de prensa, Lucio Arnáiz, presentó el trabajo titulado 'El empleo en la provincia de Alicante a la luz de la Doctrina Social de la Iglesia', que es un estudio realizado en la provincia con el que se pretende "fijar la atención en las víctimas de la presente crisis laboral y económica, recordar el valor humanizador del trabajo, sugerir pistas de avance y estimular la creación de nuevos empleos", tal y como señaló el propio Arnáiz.
Para ello el estudio propone la creación de espacios y dinámicas de análisis, incentivar a las empresas para que prioricen la creación y mantenimiento de empleo y apoyar las iniciativas de la sociedad civil y de la Iglesia para tratar de evitar que "el desempleo se convierta en una auténtica calamidad social", afirmó Arnáiz.
Se propone también estimular la creación de nuevos empleos --mediante el acompañamiento a los parados, el acceso a microcréditos para la creación de nuevas empresas, la oferta de una formación actualizada que permita el acceso a los nuevos yacimientos de empleo, el apoyo a las empresas de economía social o una nueva regulación del trabajo de las empleadas de hogar--, así como "aprovechar las circunstancias de la crisis para desarrollar valores y actitudes profundamente humanos porque otra organización económica es posible".
En esta línea, el estudio anima al fomento de las empresas que tengan en cuenta la responsabilidad social corporativa, el comercio justo, la banca ética. Asimismo, sugiera la búsqueda de una "economía sostenible", basándose en que "no es posible un crecimiento económico ilimitado", por lo que "hay que comenzar a plantearse un decrecimiento solidario para que todos puedan alcanzar unos mínimos suficiente".
Asimismo, se propone la difusión de "buenas prácticas" laborales, donde se opta "por trabajar y ganar menos, o donde se renuncia a las horas extraordinarias y a un segundo empleo para evitar despidos o favorecer la creación de nuevos empleos".
