ELA critica que la Diputación no tiene "voluntad política ni social" para que Porcelanas Bidasoa siga en activo

SAN SEBASTIAN, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -

El sindicato ELA afirmó hoy que la Diputación foral de Gipuzkoa carece de "voluntad política, ni social" para "mantener los empleos y la actividad" de la empresa Porcelanas Bidasoa, que presentó el pasado 15 de octubre un Expediente de Regulación de Empleo ERE en el que se solicita la extinción de los contratos de sus 47 trabajadores, y le acusó de "dejar morir" a la compañía cuando "lo que debe hacer" es "materializar el convenio urbanístico suscrito en 2006 y apostar por la nueva planta".

En una rueda de prensa en San Sebastián, el responsable de negociación colectiva de ELA, Joseba Villareal, acompañado del delegado del sindicato en la comarca de Bidasoa, Igor San José, y los delegados en Porcelanas Bidasoa Aintzane Sancho, Conchi Marín y Ricardo Santamaría, mostró su "repulsa" ante la actitud de la Diputación en "el conflicto" de esta empresa después de que el diputado foral de Hacienda, Peio González, que la institución foral "no invertirá" en la misma "sin un proyecto de viabilidad".

Villareal instó a González a "cambiar los mandos" de la empresa, "comenzando por el gestor que la propia Diputación asignó; Baltasar Marín". A su juicio, Marín y la Diputación están "dejando morir" Porcelanas Bidasoa "acumulando la deuda" y "favoreciendo que la desconfianza de los clientes vaya en aumento", a lo cual se suma el ERE presentado en octubre.

El responsable de ELA opinó que "no es momento de un ERE, sino de hacer cumplir el convenio urbanístico" suscrito en 2006 y de reajustar el Plan de Viabilidad a los 47 trabajadores con los que actualmente cuenta la empresa para, a continuación, ubicarla en otra parcela de manera que se realice "una apuesta decidida por la continuidad de su actividad laboral".

"Peio González se pliega a los intereses de la élite económica como Gipuzkoa Aurrera y deja a un lado a la clase trabajadora", denunció, al tiempo que lamentó que la institución foral "aboca al cierre de una empresa que tiene proyecto y viabilidad".

Por su parte, los delegados de ELA en la empresa consideraron que es "fundamental" que Porcelanas Bidasoa traslada su sede y renueve sus instalaciones para continuar la actividad laboral y dar respuesta a la carga de trabajo. Además, denunciaron que la empresa "comenzó en julio a advertir a los clientes que en octubre cerraría" la planta, "con todo lo que ello conlleva".

En este sentido, apuntaron que la nueva sede "debería estar construida en mayo de este año", y criticaron que este retraso es "el principal obstáculo para mantener la empresa". Asimismo, instaron al diputado foral de Hacienda a destituir a Marín porque "no está luchando" por que la empresa "siga viva" y las 47 familias mantengan sus puestos de trabajo.

REUNION

En este contexto, Villarreal instó a todas las partes implicadas en "el conflicto", Diputación, Ayuntamiento de Irun, Seguridad Social, a la promotora Elizatxo y la propia empresa, a mantener una reunión "cuanto antes" para hacer efectivo lo acordado en el convenio urbanístico "que está pactado y acordado" desde 2006.

De esta manera, insistió en "poner fecha y hora" para "aclarar, cuanto antes, qué intereses tiene cada parte en el cese o la continuidad" de Porcelanas Bidasoa.