ELA y ESK denuncian que la empresa Stadler de Oñati (Gipuzkoa) pretende despedir a 19 trabajadores y amenaza con cerrar

Actualizado: miércoles, 9 septiembre 2009 19:16

SAN SEBASTIAN, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos ELA y ESK denunciaron hoy la actitud de la Dirección de la empresa Stadler, situada en la localidad guipuzcoana de Oñati y dedicada a la fabricación y comercialización de piezas metálicas sinterizadas, que "pretende despedir a 19 trabajadores" y que "amenaza y chantajea con cerrar y dejar a toda la plantilla en la calle si no lo consigue".

En un comunicado, estos sindicatos censuraron que, hasta el momento, la Dirección de esta compañía "se ha negado a analizar siquiera otras alternativas presentadas por los representantes de los trabajadores" como, por ejemplo, "prejubilar gente o incentivar las bajas voluntarias".

"Nada de esto parece servirle a la Dirección de la empresa, que está decidida a aprovechar esta situación de crisis para deshacerse del personal que considera molesto a toda costa", censuró.

Además, ELA y ESK criticaron que "para lograr su objetivo" e intentar "legitimar ante las autoridades laborales", Stadler va a dejar "a una cuarta parte de su plantilla sin trabajo".

Los sindicatos explicaron que el pasado mes de julio la Dirección de la empresa "sacó una lista de 19 personas, con nombres y apellidos, y convocó una asamblea, en la cual, los trabajadores que estaban fuera de la lista 'negra' debían votar el despido de sus propios compañeros, bajo amenaza de que si no se aprobaba su plan de viabilidad cerraría la empresa e irán todos a la calle".

Según indicaron, "buena parte de la plantilla se negó a participar en esta votación, a todas luces vergonzosa", porque consideraron que "no era justo que las personas que estaban fuera de la lista negra decidieran sobre el despido de sus propios compañeros de trabajo". Sin embargo, una parte de la plantilla "sí que tomó parte en la votación, mostrándose, incluso, a favor del despido de esas 19 compañeros, creyendo que así salvarían su puesto de trabajo", añadieron.

ELA y ESK denunciaron, "enérgicamente este chantaje inadmisible", al que, a su juicio, ha sometido la dirección de la empresa Stadler a sus trabajadores y le instaron a "negociar un plan social que solucione el problema", porque en Stadler "el acuerdo es necesario y es posible, pero para lograrlo hace falta negociar, no chantajear".