El texto se centra en el acoso y otras formas de violencia sexual contra las mujeres en espacios públicos (fiestas, ocio, movilidad...)
BILBAO, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Municipios Vascos, Eudel, ha remitido a los ayuntamientos y mancomunidades de Euskadi, como cada año, un modelo de declaración institucional para los municipios vascos con motivo del 25 de Noviembre-Día internacional por la eliminación de la violencia contra las mujeres.
La Declaración de este año, que fue aprobada por las alcaldesas y los alcaldes de la Comisión Ejecutiva de Eudel en su pasada reunión del 13 de octubre, se centra en el acoso y otras formas de violencia sexual contra las mujeres en espacios públicos (fiestas, ocio, movilidad).
Según ha informado Eudel, pone a disposición de las entidades locales esta Declaración como modelo de referencia que, "desde el respeto a la autonomía local, cada municipio puede adaptar a su realidad". La Declaración de Eudel se alinea también con la campaña conjunta impulsada por todas las instituciones vascas con motivo del 25N.
Tal y como recoge el primer párrafo de la Declaración: "Este 25 de noviembre queremos reivindicar el derecho de las mujeres al uso y al disfrute del espacio público en condiciones de igualdad como garantía del ejercicio de sus derechos de ciudadanía plena y, en definitiva, como garantía del desarrollo de su propia libertad, individual y colectiva.
Eudel denuncia que la violencia sexual ejercida contra las mujeres y las niñas tiene un "objetivo claro: controlar a las mujeres y reducir su libertad", y especifica, en concreto, que "la violencia sexual ejercida en los contextos festivos y de ocio cumple esta función de control de la sexualidad de las mujeres, así como de la libre expresión de su deseo, de su cuerpo, de la movilidad, de la ocupación del espacio público, de las relaciones sociales y de su derecho al disfrute en términos de igualdad".
En el documento, la asociación municipal pone en valor los avances realizados hasta la fecha "mediante el esfuerzo tenaz de muchas mujeres de manera individual, así como de los movimientos feministas y de otras organizaciones, para la superación de la dicotomía del reparto de los espacios públicos y privados entre hombres y mujeres".
Sin embargo, reconoce que aún existen "enormes diferencias" respecto de la participación en la vida pública, del disfrute y de la "apropiación de las calles de ciudades y de pueblos". Entre los múltiples mecanismos que restringen este uso igualitario, se pone el foco en "la violencia sexual" que las mujeres y niñas de todo el mundo vienen sufriendo en el espacio público.
Por último, la Declaración de Eudel propone seis compromisos, como reforzar 'Berdinsarea' como la red de municipios para facilitar el intercambio de conocimiento sobre iniciativas y buenas prácticas en materia de igualdad y contra la violencia machista; conocer en profundidad las múltiples formas de negación del espacio público a las mujeres para tenerlas en cuenta en el diseño y desarrollo de las políticas locales; e impulsar la implementación efectiva de las leyes y políticas integrales para prevenir y responder a la violencia sexual en espacios públicos, a través del desarrollo de capacidades, sensibilización, movilización comunitaria y otras estrategias.
Además, insta a: impulsar cambios en las actitudes y comportamientos para garantizar los derechos de las mujeres y las niñas a disfrutar de espacios libres de violencia promoviendo relaciones de género respetuosas, la igualdad de género y la seguridad en los espacios públicos, así como promover inversiones en seguridad real y percibida en los espacios públicos asegurando el enfoque de género en la planificación urbana para que se tengan en cuenta las necesidades de las mujeres.
Por último, sugiere colaborar con otras instituciones y administraciones, Emakunde y diputaciones forales entre otras, así como con el tejido social, feminista, para que mujeres y niñas puedan disfrutar del espacio público con seguridad y en igualdad.
