Fundación Buesa defiende la presencia de las víctimas en las aulas y denuncia "el odio del nacionalismo radical"

Actualizado: viernes, 16 octubre 2009 21:21

VITORIA, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Fernando defendió hoy la presencia de las víctimas del terrorismo en las aulas del País Vasco para ofrecer su testimonio como forma de deslegitimar el terrorismo y aseguró que los damnificados por ETA "no odian". Por el contrario, aseguró que "el odio no es exclusivo de los terroristas", ya que "también existe en el nacionalismo radical".

La fundación realizó estas afirmaciones a través de un comunicado, un día después de que Aralar se mostrará en contra de la reformulación del Plan de educación por la paz del Gobierno vasco, que contempla la presencia de las víctimas del terrorismo en las aulas del País Vasco para trasladar su testimonio a los alumnos.

"No sentimos odio, lo que sentimos es un enorme vacío", destacó la fundación, para recordar a continuación que estas palabras fueron pronunciadas por Marta Buesa, la hija del dirigente socialista Fernando Buesa asesinado por ETA en 2000, en una rueda de prensa ofrecida cuatro días después del atentado.

Este colectivo afirmó que en ninguno de los testimonios de damnificados del terrorismo que ha recopilado "aparece ni el odio ni la venganza". "Nos permitimos sugerir a quienes pudieran albergar dudas que repasen dichos testimonios", indicó.

En esta línea, explicó que "el odio es el caldo de cultivo de la venganza", a lo que añadió que "las víctimas del terrorismo no han empleado la venganza y siempre han confiado y siguen confiando en el Estado de Derecho a la hora de reclamar justicia por el daño injustamente recibido".

La Fundación afirmó que "donde realmente anida el odio es en el corazón de los asesinos de Fernando" y del resto de las víctimas de ETA. No obstante, manifestó que "el odio no es exclusivo de los terroristas", ya que "también existe mucho odio en una parte de la sociedad vasca, concretamente en el nacionalismo radical".

Este odio, según dijo, "lleva a justificar asesinatos, extorsiones, secuestros y amenazas". Frente a ello, aseguró que "uno de los mejores antídotos es precisamente la presencia y el testimonio de las víctimas". A través de este testimonio, según la fundación, puede avanzarse hacia "la deslegitimación de terrorismo", ya que "la víctimas inocentes y carentes de odio convierten al activista en lo que realmente es: un asesino vil y cobarde".