SAN SEBASTIAN, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
Hamaikabat (H1!) afirmó hoy que la reflexión dada a conocer por la izquierda abertzale el pasado sábado en la localidad navarra de Alsasua supone "un relato de ruptura política de lo construido hasta la fecha por el pueblo vasco", por lo que es "pura imposición".
Además, afirmó que "la paz, el final de ETA, es un servicio al pueblo vasco que no admite contrapartidas" y que debe ser "consecuencia de un protagonismo de la sociedad vasca y sus instituciones propias, en el seno de los parlamentos y gobiernos vascos".
En un comunicado, Hamaikabat censuró que la izquierda abertzale plantea "un discurso político de ganadores y vencidos donde los avances son incompatibles", es decir, "no se plantea un proceso de paz en el que los avances realizados por parte de todos puedan ser complementarios y por tanto vayan consolidando el proceso de paz".
En este sentido, indicó que se plantea "'un primer paso del proceso democrático vasco', en el que hace de la necesidad virtud y en el que quiere conseguir que triunfe su relato político", un discurso con el que buscan "convencer de que el entramado institucional que la sociedad vasca ha ido tejiendo en estos 30 años supone el escenario que perpetúa el conflicto político y armado", y, por otro lado, "quieren hacernos creer que el tiempo les ha dado la razón".
Hamaikabat recordó que "el verdadero proceso democrático vasco, con sus avances y retrocesos, lleva años en marcha" y, por tanto, "hablar del proceso democrático vasco hoy es hablar de consolidación de las instituciones recuperadas tras el franquismo y es hablar de profundización democrática constante sobre la base de la voluntad expresada por los vascos".
De este modo consideró que plantear, "como plantea la izquierda abertzale, un relato de ruptura política y tratar de validarlo como resolución del conflicto y apertura de un 'proceso democrático' es una pura imposición".
A su juicio, la izquierda abertzale "no está haciendo una lectura correcta de lo que está exigiendo el pueblo vasco", puesto que "la inmensa mayoría de esta sociedad les percibe como problema más que como solución" y considera que ETA es "el mayor problema que tenemos los vascos".
Hamaikabat criticó que la izquierda abertzale "enarbola de nuevo la paz a favor de su proyecto político, como jugada de ventaja para mejorar su posición política". "Su modelo de resolución de conflicto se plantea como un proceso fáctico en el que las condiciones de ETA para su disolución buscan domesticar la voluntad democrática", añadió. Frente a ello defendió que "la paz, el final de ETA, es un servicio al pueblo vasco que no admite contrapartidas".
Además, opinó que la izquierda abertzale busca un "cambio de correlación de fuerzas" gracias a una "nueva política de alianzas y un proceso fuera de las instituciones que le aporte el protagonismo político que no le corresponde" e insistió en que el final de ETA debe ser consecuencia de un protagonismo de la sociedad vasca y sus instituciones propias".
