BILBAO, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El director general de Osakidetza, Julián Pérez Gil, inauguró hoy una nueva planta de psiquiatría en el pabellón Escuza del hospital de Basurto, en la que sobre una superficie total de 723 m2 construidos, se han retirado las habitaciones triples y han sido sustituidas por diez habitaciones dobles y dos individuales. Con ello y tras una inversión de 1,16 millones de euros, se ha aumentado la capacidad hasta las 22 camas.
Este incremento del 10 por ciento en la capacidad permitirá atender la demanda creciente de los pacientes de psiquiatría que viene suponiendo un nivel de ocupación habitual por encima del 95 por ciento.
Durante el año 2008, ingresaron en este pabellón 861 pacientes, lo que supuso un aumento del 6,74 por ciento con respecto al año anterior. La estancia media fue de 14,56 días, lo que significa una reducción de 2,57 días sobre el año 2007.
Las patologías más comunes abordadas son: las Psicosis (esquizofrenia), los trastornos afectivos (depresivos y bipolares) y los trastornos de personalidad. La planta estará atendida por siete psiquiatras, seis enfermeras y diez auxiliares de enfermería.
OTRAS ACTUACIONES
Esta reforma está encuadrada en el Plan de inversiones de Osakidetza 2007-2012 y en el II Plan de Remodelación del Hospital, cuyo objetivo principal es la modernización y adecuación de las instalaciones y equipamientos, con una inversión prevista para el hospital de Basurto de 41,8 millones de euros.
Las nuevas instalaciones permitirán, en paralelo a las actividades asistenciales, dar una mayor calidad docente en varios niveles. El primero y fundamental es la formación de residentes, tanto médicos de Psiquiatría como psicólogos de Psicología Clínica y, recientemente, enfermeras de Salud Mental.
La otra gran área de actividad que se verá acrecentada es la investigación. Los proyectos asistenciales del servicio están marcados por dos características principales: su carácter eminentemente clínico y su orientación integradora
Según manifestó Pérez, las nuevas instalaciones van a suponer un paso más en el desarrollo de las actividades terapéuticas del Servicio. "Un servicio que se enfrenta a un reto similar al de otros grandes hospitales del entorno, como es aportar unos cuidados de primer nivel en el contexto de ingresos más cortos y ocupaciones muy altas", agregó.
Igualmente, consideró necesario llevar a cabo el desarrollo de alternativas a la hospitalización que permitan dar al paciente y a sus familiares, la oportunidad de ser atendido a través de seguimientos ambulatorios intensivos que eviten la hospitalización o bien reduzcan su duración.
Por último, agradeció tanto al hospital de Bermeo como a los profesionales del servicio y de la unidad, su colaboración para poder llevar a "buen término" la obra ya que, durante estos seis meses se han visto "obligados a desplazarse al hospital de Bermeo para poder continuar con la atención de los pacientes".
