Dice que el cambio a partir de generales debe recuperar la memoria histórica, devolviendo la dignidad a quienes están en fosas del olvido
BILBAO, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Ciudadano Podemos Euskadi ha enmarcado el encuentro que el lehendakari, Iñigo Urkullu, mantendrá el 4 de septiembre con 128 alcaldes vascos para entregarles un documento con todas las víctimas mortales de la conculcación de derechos humanos en sus municipios, en "la tarea esencial para deslegitimar cualquier tipo de violencia". También cree que la presencia de ediles de EH Bildu en la convocatoria "será un paso en la buena dirección".
En un comunicado, esta formación recuerda que en este mes de agosto, "tradicionalmente festivo y vacacional, están confluyendo iniciativas positivas para la convivencia, la pacificación y la normalización política".
A su juicio, "la presencia de representantes institucionales en actos promovidos en Navarra en solidaridad con las víctimas del franquismo, muestra la sensibilidad, la voluntad de compromiso de las fuerzas políticas que impulsan el cambio en la Comunidad Foral".
Además, considera que la iniciativa del lehendakari, Iñigo Urkullu, de congregar a los alcaldes de todos los municipios vascos "que han sido escenario de episodios violentos, con víctimas tanto de ETA como de bandas parapoliciales y de las Fuerzas de Seguridad del Estado, supone una tarea esencial para deslegitimar cualquier tipo de violencia". También cree que la presencia de ediles de EH Bildu en la convocatoria "será un paso en la buena dirección".
Por ello, en este contexto "de ejercicio plural y colectivo de responsabilidad política", considera que "la manifestación a favor del acercamiento de presos de ETA enfermos, convocada en Bilbao por familiares y amigos, como un acto legítimo en defensa de los derechos humanos, que no menoscaba la memoria ni el respeto hacia las víctimas".
CAMBIO EN LAS GENERALES
Podemos Euskadi afirma que "el cambio venidero a partir de las próximas elecciones generales debe impulsar la recuperación de la memoria histórica, devolviendo el nombre y la dignidad a cientos de miles de personas que permanecen en las fosas del olvido desde hace cerca de 80 años".
De la misma manera, señala que "es preciso superar los traumas de posteriores ciclos de violencia, afrontando el correspondiente proceso de verdad, justicia y reparación, para que, en ningún caso, se produzca una amnesia colectiva, para evitar que se imponga el olvido".
