MÉRIDA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El proyecto de la nueva plaza de la Basílica Santa Eulalia de Mérida contempla la instalación de fuentes secas, jardines verticales y una plataforma única que igualará el acerado y la calzada para que se convierta en un espacio "abierto a todo el público" y "accesible".
Así, esta iniciativa, cuya construcción ha salido a licitación pública con un presupuesto de 1,5 millones, centralizará "todos los eventos de carácter religioso y social" que se celebren y estará comprometida con el entorno urbano, ha explicado el arquitecto del proyecto, Rubén Cabecera, en una rueda de prensa este lunes junto a la delegada de Urbanismo, Silvia Fernández.
Una mayor accesibilidad que se conseguirá, como ha señalado Cabecera, con la construcción de una plataforma única, que se ubicará en la parte de la Avenida de Extremadura que se sitúa en el ámbito de la basílica, con el objetivo de igualar tanto la acera como la calzada que está enfrente para que se convierta en un único espacio que pueda ser de "uso y disfrute" para la ciudadanía.
Sobre los materiales, ha explicado que se emplearán aquellos que permitan "identificar muy claramente" todos y cada uno de los elementos que forman parte de esta plaza, como el uso de granito de color oscuro para la calzada y para la "transición hacia los distintos accesos" con los que cuentan tanto la basílica como el Convento de las Freylas para que el visitante pueda reconocer "claramente" en la plaza los componentes que la configuran.
Con respecto a la iluminación, ha resaltado que se ha hecho un esfuerzo "importante", debido a que creen que un entorno público no se debe usar solo por el día, sino que también hay una necesidad "imperiosa" de sacarle partido a este espacio por la noche.
VEGETACIÓN
Además, se ha estudiado para que se ilumine una fachada de la basílica y del convento y habrá una de "cortesía" que ilumine a los usuarios en las "franjas de color oscuro" que marcan los accesos a este espacio y farolas con referencias al entorno cristiano con sombras que se proyectarán en forma de "cruz latina" durante el día.
En relación con la vegetación, Cabecera ha indicado que se incorporará una vertical que combinará con un arbolado que contará con una "infraestructura básica" que permita que los eventos se desarrollen "de la mejor manera posible"; mientras que también se colocarán fuentes secas, que son capaces de impulsar un chorro de agua, que darán una sensación de "frescor".
El proyecto, cuya superficie de la plaza será de unos 2.000 metros cuadrados, a los que se sumará los 700 metros cuadrados de plataforma única, también contempla la "liberación" de la parte norte de la basílica para crear un entorno que, en distintas fases, pueda ser utilizado por el consistorio para generar un espacio público "todavía más amplio", para ello se demolerán "algunas edificaciones" que se encuentran en esa zona y no se harán obras de urbanización en esta licitación.
Además, ha recalcado, a preguntas de los periodistas, que es "poco probable" que las obras estén "totalmente finalizadas" antes del domingo 10 de diciembre, jornada en la que empieza el Año Jubilar Eulaliense, aunque se valora en la licitación que la habilitación para el acceso de la basílica por parte de los visitantes esté "lo más temprano posible".
1,5 MILLONES DE EUROS DEL REMANENTE POSITIVO DE TESORERÍA DE 2022
Por su parte, la delegada de Urbanismo, Silvia Fernández, ha recordado que el pasado viernes, 28 de julio, salió a licitación este proyecto de transformación del entorno de la plaza de la Basílica Santa Eulalia, cuyo plazo de presentación de ofertas finaliza el 23 de agosto y en los siguientes 15 o 20 días podría estar adjudicado, por un importe de unos 1,5 millones de euros, procedentes del remanente positivo de tesorería de 2022.
En este concurso, el Ayuntamiento de Mérida otorgará una mayor puntuación a aquellas empresas que reduzcan el plazo de ejecución de la obra y su planificación y se realizará un proceso de licitación y adjudicación "rápido y exprés".
Este proyecto no solo supondrá la construcción de una nueva plaza, sino que también será un "añadido a lo que es el monumento", ha indicado Fernández, ya que se cambiará "totalmente" el entorno porque se instalarán fuentes de agua, jardines verticales con una altura de 15 metros cuadrados y se igualarán aceras y asfaltado para que sea "mucho más accesible".
Asimismo, ha destacado que ha sido un proceso "largo" y "complicado", momento en el que ha recordado el convenio de permuta firmado entre el ayuntamiento y el Arzobispado de Mérida-Badajoz y que tiene como objetivo convertirlo en un "gran centro dotacional" a la altura de los "monumentos", de la "patrona" y del "volumen de peregrinación" que se pretende alcanzar con esta obra y con el Año Jubilar.
Así, con este proyecto se pretende continuar con el compromiso con la "comunidad cristiana" y con la transformación de la ciudad siguiendo un punto turístico "más novedoso" y ha aclarado que es una "obra de ciudad", de "identidad" del "pueblo" y una prueba de la importancia que concede el consistorio a la peregrinación, a nivel "religioso" y "turístico".
La delegada de Urbanismo ha expresado que el diseño de esta nueva plaza es "original, único y hecho" específicamente "para la ciudad de Mérida" y en él, ha señalado, se han contado con "muchísimas sensibilidades" y con "emociones" para poder plasmar el proyecto "de esta manera" y que están "muy satisfechos" y que no están ni "agobiados" ni "preocupados" con los plazos.
