CÁCERES, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Representantes de los vecinos y técnicos del Ayuntamiento de Cáceres han mantenido este jueves una reunión para ir arrojando algo de claridad sobre la situación de las casi cuarenta viviendas y locales comerciales del edificio que el pasado lunes sufrió una explosión en la que murió una persona, y que desde entonces les mantiene alejados de sus viviendas y puestos de trabajo.
La fecha en la que podrán regresar es todavía una incógnita, puesto que dependerá del periodo en el que se demore la investigación que aclare los motivos de la deflagración y los trabajos de seguridad del inmueble sito en el número 19 de la Avenida Virgen de la Montaña.
Solo a partir de ese momento, y una vez se vayan restituyendo los suministros a las viviendas y locales, sus inquilinos podrán regresar a los mismos, y lo harán de forma escalonada.
Al término de la reunión, el arquitecto contratado por la comunidad de vecinos, José Luis Pedrera, ha señalado que los operarios están trabajando ya en dar solución a un muro afectado que debe ser retirado ante el riesgo que corre de desplomarse y, entonces, "se empezará a comprobar cómo están las instalaciones y en función de la situación de estabilidad de las viviendas se empezará a autorizar que vayan entrando los vecinos".
Se les irá avisando de forma individual, ya que no todas las viviendas se encuentran en la misma condición y unas podrán ocuparse antes pero en otras no podrán volver hasta pasado un tiempo. En cualquier caso, se estima que el proceso se alargue varios días ya que es mucho el trabajo que hay que hacer en el inmueble.
El presidente de la comunidad de vecinos, Ignacio Calvo, ha insistido en que habrá viviendas que se puedan ocupar "cuanto antes" y otras que "no se podrán ocupar". Respecto al origen de la explosión y posterior incendio, ha señalado que "todavía no se sabe si el origen es intencionado o accidental".
Así las cosas, por el momento se mantienen las medidas cautelares de restricciones en el acceso al edificio, así como los precintos en las viviendas de las letras H e I del 3º, 4º y 5º piso.
Cabe destacar que la policía científica sigue con las labores de investigación para determinar las causas de la deflagración, por lo que todas las actuaciones siguen supeditadas a que se concluyan dichos trabajos.
TRABAJOS DE DESESCOMBRO
Según ha informado el ayuntamiento, en el encuentro también se ha recordado que este viernes se procedió al desescombro parcial de la vivienda siniestrada, en aquellas dependencias que no afectan a la investigación.
Este viernes se ha procedido al apuntalamiento de un muro que estaba dañado y que está pendiente de su desmontaje, una vez concluya su trabajo la policía. Cuando se finalice la retirada del mismo se procederá al apuntalamiento del piso siniestrado, el 4ºI.
Los técnicos municipales han transmitido a los propietarios del inmueble que una vez finalicen los trabajos que garanticen la seguridad del edificio, en concreto la retirada del muro y el apuntalamiento de la vivienda siniestrada, el consistorio dará por finalizadas las actuaciones de emergencia y seguridad.
A partir de ese momento los técnicos municipales supervisarán las actuaciones que los propietarios del edificio deberán acometer, para lo cual han contratado a un arquitecto, quien deberá determinar que se cumplen todos los requisitos para que pueda producirse el regreso de la familias desalojadas.
En cuanto a la situación en la que se encuentra el edificio, los técnicos municipales han determinado que "no existen daños estructurales en la zona no siniestrada", si bien el arquitecto de la propiedad va a realizar una "comprobación".
Por último, desde el consistorio cacereño han asegurado que la estructura de los multicines "no tiene problemas" y que su reapertura sigue a expensas de la retirada del muro afectado y que corre riesgo de desplomarse.
