OURENSE 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de la localidades ourensanas de Maside y Taboadela vivieron momentos de tensión por los incendios que en la tarde-noche de ayer llegó a amenazar sus casas.
El de Taboadela quedó sofocado aunque en Maside hoy continúa activo un foco en la parroquia de Armeses, según información facilitada por la Consellería de Medio Rural de la Xunta de Galicia, donde se decretó el nivel de alerta 1.
Los vecinos de Maside, donde el fuego afectó a las parroquia de Outeiro, San Miguel y Casanova, aseguraron hoy que sintieron "impotencia" al ver que el fuego destrozaba sus cosechas y podía llegar a sus casas.
Según los vecinos, la proliferación del viento hizo difícil controlar las llamas, que se propagaron "en muy poco tiempo de un lugar a otro", por lo que fue necesario incluso cortar el tráfico ferroviario durante unas horas.
Una vecina de Maside explicó que, a pesar de que había medios, era "muy difícil" apagar las llamas, ya que en muy poco tiempo se extendió una cadena hacia el Viñao que era todo monte. "Por la tarde empezó a correr para el pueblo y nos llegó hasta las casas", aseveró.
En las parroquias afectadas por los incendios de Maside, los vecinos perdieron cosechas y viñedos, además de algunas viviendas deshabitadas. "Lo único que uno piensa es en salvar nuestras casas y nuestra vida personal, ya que otra cosa no se puede hacer", afirmó la vecina.
El incendio de la parroquia de Pasadán, situada en Taboadela el incendio también fue difícil de controlar y el viento hizo que pasase de un lado a otro de la carretera y se propagase por el monte, donde se encontraban viviendas.
Asimismo, fue necesario cortar durante varias horas la carretera nacional N-525 a la altura de este municipio ourensano, ya que las llamas estaban alrededor de la carretera y el humo impedía la visibilidad de los conductores.
Según los vecinos, en Pasadán ardió un desgüace y una granja aunque hoy los vecinos de la zona reclamaron que los propietarios de las fincas limpien la maleza para evitar situaciones como la vivida ayer, ya que, según una vecina, las casas que se encuentran rodeadas de fincas con maleza "corren mucho peligro" en estos casos.
Asimismo, los vecinos de Pasadán aseguraron que "echaron en falta" la presencia de los Bomberos de la zona, ya que cuando comenzó el fuego "no había nadie" y los Bomberos que se ocupan de atender la zonas de Taboadela y Allariz "no aparecieron". "Los de Celanova y Verea fueron los que acudieron y a ellos les damos las gracias", manifestó una vecina.