El proyecto se desarrollará conjuntamente en Galicia, Murcia y Extremadura durante 3 años en granjas de carácter intensivo
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Federación Galega de Medio Ambiente (Fegama) presentó hoy un proyecto piloto para la gestión de residuos orgánicos de las explotaciones ganaderas con el que busca "mitigar" el cambio climático. Para ello, emplearán el compost y la "valorización energética" para transformar el biogás en calefacción.
El secretario general técnico de Fegama, Juan Miguel Acuña, explicó, en rueda de prensa, que con el compost se busca que los agricultores no tengan que comprar fertilizantes ni emplear ningún tipo de transporte para los residuos. Así, se crea un producto libre de patógenos, que se puede almacenar y vender. De esta manera, se disminuirá la materia química en los suelos gallegos que "tiene consecuencias bastantes negativas".
El proyecto tendrá lugar conjuntamente en Galicia, Murcia y Extremadura, en la Comunidad gallega se centrará especialmente en la comarca de O Deza. Las granjas serán principalmente avícolas, porcinas, y vacunas. Además, serán explotaciones intensivas que no cuentan con base territorial suficiente para asimilar estos residuos.
En cuanto al sistema de valorización energética, se obtendrá biogás mediante un proceso anaerobio en el que se degrada la materia orgánica, dando lugar así a dióxido de carbono y metano que podrá emplearse para producir electricidad o calefacción. Para el desarrollo del programa se contará con la colaboración de la Escola Superior de Enxeñaría Ambiental de la USC, que al final del proyecto montará un biorreactor de ahorro energético en una de las explotaciones en Silleda.
Así, unos 30 ganaderos y tres explotaciones gallegas se han sumado a esta experiencia que cuenta con un gran afán "didáctico", para dar conocer la forma en la que se produce el compost. El proyecto durará tres años, en enero de 2010 comenzará el trabajo de campo y su puesta en marcha concreta será en marzo del mismo año.
SISTEMAS DE ECOGESTIÓN
Acuña explicó que el mundo agrícola tiene tres puntos "conflictivos" que afectan al efecto invernadero: la aplicación de fertilizantes, la fermentación entérica de los rumiantes y la gestión de los residuos. De esta manera se pretende difundir sistemas de ecogestión orientados al modelo europeo viables económica y ambientalmente.
El proyecto cuenta con el cofinanciación del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino; además tiene la colaboración de las federaciones extremeñas y murcianas de protección ambiental. Por último, se realizará una reportaje audiovisual donde se podrá observar todas las fases del proyecto de donde saldrá un manual explicativo de cada proceso.
