Rural.- La falta de forraje por la sequía aumentó en casi 400 euros el coste en alimentación para ganado en Galicia

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

La afectación al agro gallego del cambio climático ya ha dejado de ser una "percepción" que tenían los agricultores y ganaderos a una "constatación científica". Así, la subida de temperatura y el "déficit" de lluvias en la época que son más necesarias para los cultivos ha provocado que el sector agrario viva desde hace tres año un período de sequía, que ha sido más acuciante en 2006, provocado un caída de producción de forraje y, consecuentemente, un aumento "importante" de los costes para alimentar el ganado, que en el caso, de una granja media con 22 vacas ha sido de casi 400 euros por mes.

Así se recoge en un estudio sobre el impacto del cambio climático en el sector agroforestal gallego, basado en el análisis de datos de campo recabados en los años 2004 y 2006, elaborado por la Asociación Sectorial Forestal Galega (Asefoga) y presentado hoy en Santiago de Compostela.

"El estudio pretendía confirmar algo que se sospechaba desde hace tiempo", advirtió el director-técnico del estudio, Miguel Acuña, quien informó de que es ya una constatación científica que la temperatura en Galicia se aumentó tres veces más que la media, situado este incremento en 0,6 grados, cuando en la comunidad ha sido de 1,5 grados. "Se trata trata de una zona muy vulnerable, a la que le está afectando el cambio climático", reconoció.

Un incremento de temperaturas al que suma el "importante déficit de precipitaciones" que ha influido "muy negativamente" en los cultivos de forraje para la alimentación de los animales con una "importante merma", precisó una de las técnicas el estudio, Gema Bértoa, quien indició que llegó al punto de que a finales de 2006, los ganaderos ya no disponían de alimento para sus animales, que tuvieron que acudir al mercado de fuera, "justo en el momento en el que estaba más caro por su escasez", añadió el secretario general de Asefoga, Jacobo Feijóo.

Precisamente, los datos de campo del estudio, elaborado entre 250 explotaciones de leche y carne de diez comarcas gallegas (Deza, Xallas, Ordes, Arzúa, Terra Cha, Lemos, Sarria, Ancares y Fonsagrada), permitió constatar también pérdidas media de 10% en la producción de hierba en el periodo 2003-2006, lo que traducido en dinero, supuso unas pérdidas entre 41 y 47 euros por hectárea en el caso de la destinada para silo; y de entre 30 y 33 euros/hectárea para la hierbaseca.

No obstante, Bértoa no sólo informó de que esto supuso un incremento de los costes destinados al forraje que alimenta al ganado, sino que la sequía también repercute en un aumento de los plagas y por tanto, las explotaciones tuvieron que destinar más dinero a la compra de productos fitosanitarios.

De igual modo, las altas temperaturas también inciden en un incremento de las enfermedades en el ganado como mamitis y neumonía, con el consiguiente incremento de gastos en la medicación precisa; al igual que los vacas disminuyen su producción de leche. "En definitiva, las explotaciones aumenta sus costes y obtienen menos ingresos", resumió Gema Bértoa.

AUMENTAR LA DIMENSIÓN DE LAS EXPLOTACIONES

Ante situación, el secretario xeral de Asefoga abogó porque los ganaderos redimensionen sus explotaciones y aumenten el terreno a cultivos destinados al alimento de los animales, para que sean más autosuficiente y no tengan que comprarlo. En este sentido, apuntó al papel positivo que jugará el Banco de Terras.

De igual modo, también abogó por que apuesten por otras especies de forraje que sean "más resistentes" a las altas temperaturas y a las plagas que éstas provocan.

Asimismo, el director-técnico del estudio, Miguel Acuña, también se mostró partidario de "mejorar la eficiencia" del sistema de riego actual, ya alertó que, en la actualidad, sólo cuenta con un 30% de eficiencia.

BIOCOMBUSTIBLE Y SUBIDA DE FORRAJE

El secretario de Asefoga admitió que el incremento del precio del forraje destinado a la alimentación del ganado no sólo está vinculado con la caída de producción debido a las malas cosechas por la sequía, sino también a la alta demanda para biocombustible.

Así, advirtió de que este hecho provocará un incremento en los próximo años de hasta un 25% de este forraje. No obstante, Miguel Acuña aclaró que también se prevé que en un "futuro no muy lejano" el biocombustible de segunda generación busque otras especies de cultivo alternativas a las actuales.

Al respecto, Jacobo Feijóo recordó que, en la actualidad, en bioalcohol utiliza grano y cereal. No obstante, apuntó que se busca utilizar residuos leñosos como madera o paja.