SANTIAGO DE COMPOSTELA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
La actividad agraria de Galicia registró este año 1.100 nuevas incorporaciones, tanto a través de la titularidad exclusiva como de la compartida, e igualó la cifra de los últimos cuatro años juntos, según informó hoy el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, quien subrayó la importancia de este dato para "fomentar la continuidad" del sector.
En su intervención junto al vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, en la jornada 'Queremos participar', Suárez Canal reivindicó las medidas adoptadas por su departamento para promover estas incorporaciones y favorecer la implicación de los jóvenes con la agricultura.
Así, se mostró convencido de que el concurso de las nuevas generaciones contribuirá a "estimular" la introducción de nuevas tecnologías y asegurar la competitividad del sector. Además, subrayó el hecho de que el 56 por ciento de las incorporaciones de este año correspondieron a mujeres.
Al respecto, abogó por políticas encaminadas a "corregir" las desigualdades e impulsar el protagonismo femenino a través de su "participación activa" en las actividades que tienen lugar en el ámbito rural, incidiendo en las agrarias, y con el objetivo de garantizar la equiparación de derechos.
TITULARIDAD COMPARTIDA
En este sentido, recordó que, en el marco de las ayudas destinadas a la segunda instalación o titularidad compartida, el porcentaje de mujeres que accedieron ascendió al 83 por ciento, según él, una "importante acogida" al "reconocimiento del trabajo de los cónyuges en la misma explotación".
Además, destacó que esta medida, "por primera vez, valora el trabajo compartido de gestión y de toma de decisiones que tradicionalmente venían desarrollando las mujeres". "Desde la Consellería de Medio Rural somos conscientes de que éste es tan sólo uno de los pasos precisos para ir caminando hacia la mejora de la situación de la mujer rural", añadió.
Por ello, se comprometió a "no dejar de trabajar" para promover la participación femenina en la creación de iniciativas "con vocación de permanencia en el territorio" y calificó a las mujeres de "columna vertebral para mantener el rural". "Sus derechos tienen que cobrar carta de naturaleza", incidió.
INVISIBILIDAD
Por su parte, Quintana coincidió en alertar de la "invisibilidad" de la mujer en el ámbito rural y se mostró convencido de que, para cambiar la situación, es necesario extender los servicios "a todo el país" para "avanzar en la igualdad". En este sentido, abogó por dejar de "valorizar eternamente el trabajo femenino" para proceder a "dar pasos efectivos con medidas concretas", como el plan para acceder a la cotitularidad.
De igual modo, abogó por "romper el absurdo de no hacer servicios porque queda poca gente". "Así cada vez habrá más despoblación y menos vida en el rural, porque si no hacemos servicios, la poca gente que queda, se marcha", añadió.
En consecuencia, se comprometió a "romper esa rueda" con iniciativas como las galescolas y destacó que, pese a que a las dos provincias más deprimidas, Lugo y Ourense, no les corresponderían por población, el bipartito se comprometió a situarlas "a la cabeza del Estado" en cobertura de escuelas infantiles, por encima del 33 por ciento.