Rural.- Investigadores proponen profesionalizar el uso de ganado rústico como desbrozador de monte para evitar incendios

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

La actividad silvopastoril "bien planificada" es una herramienta "muy importante" de prevención de incendios, aseveró hoy el investigador de la USC Antonio Rigueiro para defender que se profesionalice del uso de ganado rústico (vacas, caballos, ovejas y cabras) como "desbrozador" del monte, reduciendo así la masa altamente combustible.

Rigueiro, profesor de la Escuela Politécnica Superior de Lugo, participó hoy en Santiago en el Centro de Estudios Avanzados (CEA) en una jornadas sobre los incendios forestales en Galicia de investigadores de la USC, donde informó de actividades experimentales realizadas en esta dirección con "muy buenos resultados".

"Durante la oleada de incendios, en los montes donde el ganado había realizado esta labor de desbroce no pasó absolutamente nada, mientras todo lo demás de alrededor resultó calcinado", apuntó a modo de ejemplo.

EMPRESAS, INCENTIVADAS POR LA XUNTA

Para la profesionalización de este uso de ganado, Rigueiro abogó incluso por la creación de empresas que presten este servicio de desbroce a través de la actividad devoradora de ovejas, vacas, caballos o cabras a propietarios particulares o sociedades de montes en man común.

Para incentivar esta actividad silvopastoril de un manera profesionalizada, Rigueiro consideró necesario la implicación de la Administración, a través de ayudas e incentivos económicos por parte del Gobierno gallego. Además, como medida viable y rentable, apuntó que ya hay experiencias en Galicia de propietarios de ganado (ovejas concretamente) a quienes le son requeridos y remunerados la actividad desbrozadora de sus reses.

Así, explicó que durante 15 días o incluso un mes estos animales se dedican a pastar en estos montes de una manera intensiva dejándolo limpio de tojos y otras especies. Un solución que consideró "muy buena" para montes como los de eucaliptos, ya que advirtió que su rentabilidad no permite un desbroce cada dos años, tal y como sería lo óptimo para tenerlo limpio.

Por ello, insistió en que sería "bueno" una "especialización" en Galicia de la ganadería para esta labor silvipastoril y precisó que el caballo es más efectivo para plantaciones de pinos y eucaliptos, indiferentemente, mientras que la cabra "no es compatible" con el eucalipto.

Asimismo, apuntó que el ganado que se especialice en esta actividad tiene que ser "rústico", es decir y según sus propias palabras, que "pueda pasar hambre"; que no necesite "grandes cuidados"; y que esté acostumbrado "a pasarlo mal". Por ello, abogó por razas "autóctonas, del país", y se decantó, por aquellas que están en "peligro de extinción", con lo que serviría también de medida de freno para evitar su desaparición.

En cuanto a la efectividad de este pastoreo, Rigueiro precisó que dependerá de la intensidad de horas y la carga (número de animales por hectáreas). Así, advirtió que se "puede jugar" con estos dos elementos si al propietario le interesa que se elimine completamente, o no, determinadas especies.

Precisamente, garantizó que se puede conseguir vegetación herbácea e incluso prados naturales en un monte gracias a la presión ganadera que se lleve a cabo en un lugar. Concretamente, abogó por "una o dos cabras por hectárea" y un caballo para "dos o cuatro hectáreas".

EFECTOS BENEFICIOSOS

En su intervención, este investigador de la USC subrayó otros "efectos beneficiosos" de la actividad silvipastoril como el incremento de la rentabilidad del monte, que incluso destacó que se puede aumentar hasta el 50%.

Además, indicó que "si las cosas van bien" la rentabilidad los animales que el propietario decida destinar a esta labor de desbroce puede ser "mayor" que la de la madera que llegue a vender.

Asimismo, consideró como efecto "muy importante" el hecho de que "acortará" el tiempo de "retorno económico" de las inversiones realizadas en una reforestación.

Al respecto, recordó que una reforestación de eucalipto puede tardar hasta 15 años en obtener beneficio. Por ello, destacó que contar con este ganado rústico le supondrá al propietario una "renta fija todos los años".