La Fundación ecologista Germán Estévez lamenta que "llegue tarde" y que exija un mínimo de dos hectáreas
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Consellería de Medio Rural prevé tener lista en el plazo de un mes la primera orden de ayudas destinada a financiar en exclusiva la reforestación con frondosas caducifolias, con el objeto de paliar la tendencia a la desaparición de este tipo de especies registrada en los últimos años. La partida inicial será de un 1.000.000 de euros.
"Se trata de una orden novedosa porque es la primera vez que se abre una línea de ayudas en exclusiva sólo para favorecer la plantación de caducifolias", aseguró a Europa Press la Consellería de Medio Rural, que aclaró que, no obstante, financia también la reforestación con otras especies a través de otras normativas.
De este modo, el departamento que dirige Alfredo Suárez Canal aclaró que no pretende ir "contra ninguna especie" y destacó que en las más de dos millones de hectáreas de monte existente en Galicia, "hay sitio para todas: eucalipto, pinos, castaños...".
No obstante, Medio Rural consideró necesario una "apuesta" por las frondosas caducifolias por tratarse de una madera de calidad, "con lo que se puede ampliar así la industria de primera y segunda transformación en Galicia".
CAMBIO DE EUCALIPTO POR CADUCIFOLIAS
Por ello, financiará el cambio de especie en masas de eucalipto agotadas por frondosas caducifolias y el aumento de la densidad en terrenos donde existan estas especies.
Además, Medio Rural recordó que se trata de especies no pirófitas y muy poco combustibles, que suponen, así también una barrera natural en casos de fuegos forestales, después de la crisis incendiaria registrada en Galicia en agosto.
Precisamente, y según el borrador de esta orden de ayudas a la que tuvo acceso Europa Press --ya que todavía esta en proceso de consenso con el sector-- se subvencionará la creación de espacios naturales con frondosas para la protección de núcleos rurales contra los incendios forestales.
De igual modo, destacó que Medio Rural favorecerá así con estas ayudas la disminución de riesgo de incendios mediante la creación de áreas cortafuegos con frondosas caducifolias.
Podrán ser beneficiarios de estas ayudas los propietarios particulares, las agrupaciones de estos dueños, cooperativas agrarias, comunidades de montes vecinales y mancomunidades de montes en man común.
MÍNIMO DOS HECTAREAS
La financiación serán como máximo el 70% del valor máximo de inversión. Para las solicitudes realizadas por propietarios particulares de modo individual la superficie mínima de actuación es de dos hectáreas y la máxima de cinco hectáreas, no admitiéndose más de un coto redondo por solicitud y municipio.
En cuanto a las comunidades y mancomunidades de montes vecinales en man común, cooperativas agrícolas, o agrupaciones de propietarios particulares, la superficie mínima continua de actuación será de dos hectáreas y la máxima 15 hectáreas, admitiéndose más de un coto redondo por solicitud, siempre y cuando supere la superficie mínima.
NO CONSENSUADA Y LLEGA TARDE
La Fundación Germán Estévez para la protección de la naturaleza y la defensa del medio ambiente criticó que esta orden no haya sido consensuada con los propietarios afectados por los incendios y lamentó "que se exija un mínimo de dos hectáreas para optar a las ayudas".
Así, la fundación conservacionista reclamó al Ejecutivo gallego que reduzca ese límite porque "en Galicia predomina el minifundismo" y es muy difícil reunir en una única parcela las dos hectáreas mínimas para acceder a las subvenciones de Medio Rural.
En ese mismo sentido, solicitaron unas ayudas "más ambiciosas" y consideraron que "llegan un poco tarde" porque para cuando la orden sea definitiva "el tiempo de plantación pasa a mediados del mes de mayo y junio y en esta época la tierra está demasiado aireada y la planta carece de fuerza para poder sobrevivir".
Los ecologistas también se quejaron de que no se lleve a cabo desde la Administración autonómica "una política de integración y de colaboración con los ayuntamientos", que según ellos se quejan de que se subvencione a las comunidades de montes, "que tienen la mayor parte de la masa forestal abandonada y sin uso".
En ese sentido, la Fundación Germán Estévez apostó por revisar la ley de montes vecinales e intervenir en las comunidades que no lleven a cabo ningún tipo de proyecto de defensa del terreno comunal. Por último, solicitaron un convenio con ayuntamientos, ecologistas y propietarios para reforestar los montes, ya que consideran necesarias "más de 40 millones de plantas para evitar la desertización y el corrimiento de tierras".
