Rural.- El sector de la madera se personará como acusación particular contra los incendiarios

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

El sector de la madera en Galicia se personará como acusación particular en los procesos judiciales abiertos contra los causantes de los incendios que asolaron la Comunidad gallega durante el 4 y 15 de agosto.

Esta es una de las medida adoptadas conjuntamente por el Clúster de la Madera, la Asociación Galega Monte Industria y la Fearmaga durante la reunión mantenida hoy en Santiago de Compostela.

En la primera evaluación de las pérdidas concluyeron que el mayor impacto negativo para la industria es "difícilmente cuantificable" puesto que se producirá a "medio y largo" plazo. Además, alertaron que la gran cantidad de superficie arbolada que se ha calcinado provocará "escasez" de madera en los próximos años y "falta de calidad" de la materia prima.

El sector maderero advirtió de que esta circunstancia "condenará" al cierre a numerosas empresas que se encontrarán con "problemas de abastecimiento".

Además, las empresas madereras indicaron que la necesidad de retirar "cuanto antes" la madera quemada, coloca a la industria ante un "desafío logístico" sin precedentes.

Por otra parte, recordaron que durante esta crisis las empresas han sufrido pérdidas directas y concretas; en su patrimonio forestal, en la madera verde comprometida que finalmente ardió, así como en diversas instalaciones afectadas.

45.000 TONELADAS DE MADERA PERDIDA

En concreto, informaron de que en esta ola de incendios, la industria perdió 45.000 toneladas de madera adquirida con anterioridad a los incendios y que, finalmente, fueron pasto de las llamas.

No obstante, consideraron "todavía más grave" la pérdida de 1.719 hectáreas de sus propias plantaciones, lo que equivale al 12% de su patrimonio forestal.

Finalmente, destacaron que la industria ha colaborado en las labores de extinción de incendios con sus propios medios, humanos y materiales. Así, un total de 187 empleados de las empresas del sector trabajaron durante los 12 días para apagar las llamas.